El exconselleiro rivalizaría con el portavoz municipal del PP, pero la elección final podría posponerse hasta febrero
05 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Un mes después de abandonar el Ejecutivo autónomo, Javier Guerra todavía no ha despejado sus opciones de futuro. A principios de diciembre, después de ser el único descarte de Núñez Feijoo para su segundo Gobierno, el exconselleiro de Economía declaró que se iba a tomar unos días para meditar.
La Voz habló ayer con Guerra y este aseguró que el proceso sigue sin resolverse. «Sigo en una etapa de reflexión y todavía no lo he resuelto; además, mañana es fiesta», afirmó el ahora parlamentario popular en tono enigmático. Las preguntas del periodista no lograron que desvelara cuáles son sus aspiraciones.
La tensión con el presidente de la Xunta que al parecer rodeó su cese y la supuesta oferta de encabezar la candidatura a la alcaldía viguesa siguen condicionando la actividad del primer partido en la ciudad. En estos momentos las cartas están sobre la mesa por parte de su presidente, José Manuel Figueroa, portavoz municipal que aspira a ser por primera vez candidato a la alcaldía de Vigo.
En ese camino el principal obstáculo en estos momentos es la posibilidad de que Javier Guerra quiera también tantear sus posibilidades una vez que ha dejado la Xunta. Estos días el exconselleiro se encuentra de vacaciones en Portugal y no regresará hasta la próxima semana.
Fuentes del PP consultadas por este periódico creen que las novedades llegarán en febrero con la celebración del congreso provincial del PP. En el gallego de mediados de enero es muy probable que Guerra acceda a la ejecutiva, algo que ya anunció Feijoo tras cesarlo. Cosa muy diferente es que después se confirme que disputará la alcaldía a Caballero, lo que supondría dejar en la cuneta a Figueroa.
Se da la circunstancia de que ambos tienen una antigua relación personal. En el 2003 coincidieron en el gobierno municipal de Corina Porro, con Guerra de responsable de Personal y Figueroa en Urbanismo. Posteriormente, el primero fue elegido diputado al Congreso, de donde lo rescató Feijoo para su gobierno. La historia posterior es conocida: ejerció cuatro años y fue el único conselleiro que no repitió.
Y mientras el PP se lo piensa, el BNG acaba de relevar a su portavoz municipal en Vigo. Iolanda Veloso ocupa el cargo que desempeñaba Santiago Domínguez.