Los dos mandatarios también analizaron posible participación de empresas y capitales españoles en diversos proyectos de infraestructura en Brasil, como la construcción de la línea de tren de alta velocidad entre Rio de Janeiro y Sao Paulo, o participar en la logística de eventos como la Copa del Mundo de 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016.
Antes de dejar España, Rousseff tenía previsto también hacer una presentación sobre la actual coyuntura económica brasileña en un seminario organizado por periódicos brasileños y españoles.