Rajoy adelanta al 2013 el inicio de la recuperación y confía en acelerarla

Ander Azpiroz CÄDIZ / COLPISA

ESPAÑA

El rey, que llegó a la foto de familia con retraso y ayudándose con una muleta, fue recibido con un aplauso por los demás mandatarios.
El rey, que llegó a la foto de familia con retraso y ayudándose con una muleta, fue recibido con un aplauso por los demás mandatarios. Marcou < / span>afp< / span>

En la cumbre de Cádiz, abre las puertas a la inversión latinoamericana

18 nov 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

Crisis. Esta fue la palabra más pronunciada por los jefes de Estado y de Gobierno iberoamericanos a lo largo de los dos días que ha durado la 22ª Cumbre Iberoamericana celebrada en Cádiz. El panorama a un lado y otro del Atlántico ha cambiado mucho desde que hace 21 años se celebró en la ciudad mexicana de Guadalajara la primera reunión de los líderes de los países latinoamericanos. España ha dejado de ser el primo rico y busca la forma de salir del atolladero.

En la rueda de prensa posterior a la clausura de la cumbre, el presidente Mariano Rajoy expresó su esperanza en que la recuperación económica comience «a partir de la parte final» del 2013. Hace tan solo unos días había fijado en el Senado el inicio de la reactivación para el 2014. Pero fue aún más allá y aseguró que el proceso se podría acelerar todavía más si España resuelve «el problema más importante que tiene: el de la financiación a unos precios razonables». Esta es la batalla a la que el presidente ha dado prioridad absoluta, y de su evolución en las próxima semanas depende que el Gobierno solicite o no el rescate a al UE.

Y mientras España se debate en estos problemas, América Latina crece a una media del 3 % anual, con algunos países incluso en cifras de dos dígitos,. A ello se suma la consolidación de Brasil como sexta potencia mundial y el empuje de Argentina y México.

Los 15.000 millones de euros destinados por España a proyectos de cooperación en Iberoamérica a lo largo de los últimos diez años son cosa del pasado. El Gobierno reconoce de forma pública la imposibilidad de mantener ese esfuerzo. Es más, ahora reclama ayuda. «Si América Latina es una oportunidad para Europa, nosotros también lo somos para ustedes», afirmó Rajoy ante los otros 16 jefes de Estado y de Gobierno presentes en Cádiz. Rajoy fue aún más allá en su ofrecimiento. «No necesito decirles que la inversión latinoamericana es acogida con los brazos abiertos. Y sus empresas encontrarán un terreno fértil para la creación de riqueza en beneficios de todos», declaró.

Las condiciones para fortalecer la relación económica son fuertes, resaltó el presidente. Para ello se fundamentó en los 115.000 millones de euros invertidos por España en el continente a lo largo de la última década, 7.000 de ellos en el 2011 a pesar de la más que difícil coyuntura económica.

Seguridad jurídica

En su discurso ante los otros mandatarios, Rajoy no obvió la expropiación de YPF por parte del Gobierno argentino. En su llamamiento a las empresas latinoamericanas a invertir en España, alabó «el marco de seguridad jurídica existente en Europa» que impide acciones como la efectuada por Argentina contra los intereses de Repsol. «Todos coincidimos en que ha de ser un valor compartido y respetado en ambas regiones», apuntó, para añadir a continuación que «la inversión es crecimiento y empleo, la seguridad jurídica es su nutriente y el incremento de la renta es su fruto». En la declaración final de la cumbre, según han pactado los 21 países firmantes por unanimidad, incluido Argentina, la Comunidad Iberoamericana aboga por «fortalecer reglas claras, estables y previsibles que ayuden a promover las inversiones productivas nacionales y extranjeras, de acuerdo con las leyes de cada país».