Bretón dijo hace 10 meses ante la fogata de Las Quemadillas: «Los niños están muy cerca»

Elena Jiménez / Colpisa

ESPAÑA

El comisario jefe de la investigación, Serafín Castro, reconoce que el padre de los niños desaparecidos de Córdoba hizo ese comentario hace 10 meses

30 ago 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

José Bretón, padre de los niños desaparecidos en Córdoba hace más de diez meses, confesó al comisario jefe de la investigación, Serafín Castro, durante uno de los registros en la finca de Las Quemadillas que los niños «estaban muy cerca». Lo dijo a dos metros de los restos de la hoguera en la que, según dos peritajes, se incineraron lo restos de dos menores.

Las declaraciones del mando policial son las primeras explicaciones que ofrecen las fuerzas de seguridad desde que comenzó la investigación el pasado 8 de octubre. El comisario desveló este miércoles algunas de las conversaciones que los agentes mantuvieron con el acusado antes de su detención. Una de las más inquietantes ocurrió a lado de la hoguera donde han aparecido los restos óseos que se cree pertenecen a Ruth y José durante uno de los registros de la finca familiar. Castro, convencido de que la versión que había dado el acusado sobre la pérdida de los niños en el Parque Cruz Conde de Córdoba carecía de credibilidad, le preguntó: «José, ¿dónde están tus hijos?» a lo que respondió «están muy cerca».

El policía insistió: «evítanos todo esto y terminemos con el caso», pero no consiguió que las declaraciones de Bretón fueran más allá del «muy cerca». Solo retomó el contacto con el padre de los niños días más tarde cuando el sospechoso se dirigió al comisario y le dijo: «¿has visto la que me has montado?».

Desde entonces, el padre de los niños no se ha referido ante la Policía a sus hijos en ningún momento y se ha mostrado «inquieto, altivo y soberbio» cuando los agentes le han preguntado por su expareja, Ruth Ortiz. Sin embargo, asegura el mando policial, cuando Bretón era consciente de que sus manifestaciones podían volverse en su contra daba un paso atrás y evitaba referirse a la madre de sus hijos.

Todas estas explicaciones son el resultado de varios análisis de conductas que la Policía ha hecho del acusado y que reflejan los muy diversos comportamientos que ha tenido Bretón antes y después de su detención.

Como prueba de ello, en el segundo registro de la finca paterna -recordó el comisario- el padre de lo smenores, con un estado anímico muy jovial, «invitó a comer a los agentes y se ofreció a poner música» mientras se realizaba la búsqueda de los pequeños.

A pesar de estos cambios de actitud, Castro defendió los resultados de los informes psicológicos y psiquiátricos pedidos en su momento por el juez del caso, José Luis Rodríguez Lainz, que reconocen que Bretón «no tiene ningún trastorno de personalidad». El comisario descartó así que el acusado sufra un problema de esas características y añade que, al ser consciente de que miente, Bretón «quiere creerse su propia mentira».

El mayor daño

La frialdad y serenidad que el sospechoso mostró durante toda la búsqueda de los niños han sido objeto de sorpresa para todos los agentes que han estado con él en la investigación. Por ese motivo, el comisario tachó de «increíble» la actitud del acusado y cree que actúa por venganza al no ser capaz de aceptar que Ruth Ortiz quisiera divorciarse de él.

En palabras del jefe de la investigación, «el mayor daño que le puede hacer a una madre es apartarle de sus hijos».

Respecto a las sospechas que han salpicado a la familia paterna de los niños desaparecidos, el comisario afirmó que «no hay indicios de que la familia tuviera conocimiento de lo ocurrido».

El comisario Castro también salió ayer a la defensa del primer informe policial que aseguró que los restos hallados en la hoguera en la finca de 'Las Quemadillas' dos días después de la desaparición de los niños el 8 de octubre eran «huesos de pequeños animales» y no de seres humanos.

Insistió en que, hasta que no se conozcan los resultados de los nuevos informes sobre los restos óseos hallados en la fogata, «no se puede hablar de error policial sino de informes contradictorios».