Fomento investiga a Ryanair por los aterrizajes de emergencia en Valencia

Mateo Balín / Colpisa

ESPAÑA

AESA indaga la actuación de los tres aviones de la compañía de bajo coste después de una denuncia por parte de un controlador aéreo

20 ago 2012 . Actualizado a las 23:59 h.

El Ministerio de Fomento tiene en su poder una denuncia contra Ryanair por los aterrizajes de emergencia de tres aviones de la compañía irlandesa en Valencia el pasado 26 de julio. La queja fue aportada por un controlador aéreo del aeropuerto de Manises a la asociación de afectados por el accidente de Spanair, el JK-5022, y estos se la remitieron al ministerio para que actuase a través de la Agencia Española de Seguridad Aérea (AESA), según fuentes jurídicas.

El controlador aéreo acudió a título particular al colectivo de afectados para denunciar las maniobras de los aviones de Ryanair, que tuvieron que aterrizar con urgencia por falta de combustible después de que una tormenta eléctrica en Madrid les obligara a desviarse a Valencia junto a otras doce aeronaves.

La denuncia ya está en manos de AESA, que ha abierto una investigación sobre el caso y que podría derivar en posibles sanciones contra la compañía de bajo coste, según señalaron dichas fuentes. El supervisor nacional solo tiene capacidad inspectora y sancionadora, ya que la licencia a Ryanair se la concede la aviación civil irlandesa. Sin embargo, España sí podría evitar que la aerolínea de bajo coste volara en territorio nacional, según el sindicatos de pilotos SEPLA.

Reserva de carburante

Los controladores aéreos fueron los primeros en expresar su preocupación por estos incidentes al apuntar que la compañía «bajó» de los límites mínimos su combustible. La normativa europea indica que un avión debe llevar un 5% extra y una reserva final de entre 30 y 45 minutos de recorrido.

En el caso de los aterrizajes de Manises, consideraron que los tres aviones estuvieron a lo sumo «diez minutos» sobre Valencia, que las tres llamadas de emergencia se produjeron en cadena y que una de ellas se hizo a 13.000 pies, una altura muy elevada para sobrevolar una ciudad.

Por su parte, el presidente de Ryanair, Michael O'Leary, aseguró este lunes que sus pilotos cumplieron con los procedimientos de seguridad y calificó el incidente de «puntual», ya que el 26 de julio aterrizaron 80 vuelos de la compañía en Madrid y no hubo ningún problema. Asimismo, señaló que se demostrará, ante cualquier investigación, que cumplieron con los procedimientos de desvío y con los de reserva de combustible.

O'Leary detalló que los tres aviones tuvieron que sobrevolar durante 50, 68 y 69 minutos cada uno, después de la hora prevista para aterrizar en Madrid, momento en el que tenían alrededor de hora y media de combustible de reserva. Y que tomaron suelo en Valencia utilizando el procedimiento «may-day» porque es el que se requiere cuando una aeronave se acerca a los 30 minutos de reserva de combustible.

La ministra de Fomento, Ana Pastor, reconoció este lunes que hay una investigación en marcha y que »lo más importante es preservar la seguridad y garantizar que los ciudadanos españoles que viajen en avión tengan las máximas garantías».