Torres-Dulce cree que la Justicia precisa una ruptura de modelo

D. v. a coruña / la voz

ESPAÑA

El fiscal general del Estado, ayer en A Coruña.
El fiscal general del Estado, ayer en A Coruña. GUSTAVO RIVAS< / span>

14 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, abogó ayer en A Coruña, donde clausuró un curso de la UNED, por una «ruptura» del modelo, más que una reforma, a la hora de abordar los cambios en la Ley de Enjuiciamiento Criminal anunciados y que cree necesarios para modernizar la Justicia.

Aseguró que hoy todavía están vigentes algunos de los diagnósticos realizados por el jurista Alonso Martínez en la exposición de motivos de la normativa de 1882 y tildó de «parcheos» las modificaciones realizadas en los últimos años, ya que asegura que en algunos casos no llegan a ser efectivas y en otros «no están justificadas». Torres-Dulce estimó que para mejorar el sistema es imprescindible, en estos momentos, racionalizar los juicios rápidos y un cambio en el tratamiento de las faltas. También cuestionó que nunca se auditen las reformas administrativas después de implantarlas y no se cuantifique su coste, porque, dice, hoy, la plantilla de la Administración de Justicia es «lo más parecido a un chicle».

Sobre la situación del Consejo del Poder Judicial, afirmó que le corresponde a este órgano «examinar las circunstancias en las que se encuentra» y se mostró seguro «de que hallará un camino para dotar de la estabilidad imprescindible a un órgano tan importante en la arquitectura constitucional de España».