El PP frena las aspiraciones de Camps y le recuerda que Valencia ya tiene presidente

Enrique Clemente Navarro
enrique clemente MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

El exjefe del Ejecutivo autonómico afirma en una entrevista que está más preparado que nunca para los cargos más altos

22 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Solo dos meses después de que un jurado popular lo declarara por la mínima no culpable en el caso de los trajes, Francisco Camps vuelve dispuesto a dar guerra. «Estoy más preparado que nunca para ser presidente de la Generalitat o del Gobierno», asegura en una extensa entrevista que publica la revista Telva, ilustrada con fotos tomadas en la Albufera. «Tras todos estos años en la primera línea de la política, sé que todavía tengo más hechuras», añade. A pesar de que aún están por aclarar casos tan graves como el de la supuesta financiación irregular del PP valenciano y de que aparecen imputados destacados miembros del Gobierno que presidió, no está dispuesto a dejar la política. «Jamás», zanja. Y añade que los valencianos lo quieren y defendieron su honorabilidad en las urnas.

Sus declaraciones, que coinciden con la condena a seis años de Jaume Matas, causaron estupor en el PP. No solo crean problemas a su sucesor, Alberto Fabra, sino también a Mariano Rajoy, que en su día puso como modelo al expresidente balear y no escatimó elogios por el valenciano, a quien dijo que apoyaría siempre. Pero el PP frenó en seco sus aspiraciones al recordarle que la comunidad ya tiene un presidente, que es Fabra, al que ahora toca apoyar.

Pocos creen que Camps esté pensando en disputar a Fabra la presidencia del partido en el congreso regional que se celebrará en abril, sino más bien que ha lanzado un mensaje dirigido a Rajoy y a María Dolores de Cospedal para que no le den por muerto políticamente y le busquen una salida a su altura.

Camps relata que el momento más duro que ha pasado fue el de su dimisión y que tomó la decisión durante una reunión en la que estaba presentes Rita Barberá; Federico Trillo y su asistente Julieta; Juan Cotino; el consejero de Justicia, Jorge Cabré; su mujer, Isabel; «y, por teléfono, Mariano Rajoy».

Asegura que su bagaje es «impresionante», que hizo de la comunidad el «motor de este país» y que la austeridad ha sido siempre su bandera.

El dirigente socialista Gaspar Zarrías aseguró que Camps «perdió el norte hace mucho tiempo y sigue sin encontrarlo». Los grupos de la oposición valenciana coinciden en que está «inhabilitado políticamente», es «inconsciente de la realidad que le rodea» y está en un estado de «enajenación política».