La Fiscalía Anticorrupción se opuso a que se archive el caso Gürtel con respecto al constructor José Luis Ulibarri al considerar que los indicios contra él proceden de declaraciones anteriores a las comunicaciones que ordenó grabar Baltasar Garzón (y por lo que el Tribunal Supremo inhabilitó al juez). Así consta en el escrito que la Fiscalía envió al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, al que el abogado de Ulibarri, Ignacio Peláez, pidió el sobreseimiento basándose en la sentencia del alto tribunal que condenó a Garzón por ordenar las escuchas.
Según el letrado, los indicios que obran en la causa contra su cliente parten de datos obtenidos de la intervención de una entrevista que el 25 de febrero del 2009 Peláez mantuvo en prisión con el líder de la trama, Francisco Correa, por lo que, a su juicio, deben considerarse ilícitos. La Fiscalía afirma que proceden de documentación y declaraciones anteriores.