Miles de personas, entre ellas políticos y representantes sindicales y del mundo de la cultura, arroparon ayer en Madrid al juez Baltasar Garzón en una manifestación para denunciar la campaña de desprestigio a la que, consideran, está sometido el magistrado en el Tribunal Supremo.
Convocada por la plataforma Solidarios con Garzón, la manifestación estuvo encabezada por los líderes de CC.?OO. y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez; el coordinador general de IU, Cayo Lara, y el diputado de esta coalición Gaspar Llamazares, los socialistas Pedro Zerolo y Soraya Rodríguez y actrices como Pilar Bardem, Marisa Paredes y Lola Herrera.
Para Cayo Lara, el Supremo está «tendiendo puentes de plata a la corrupción y un muro de silencio al genocidio franquista» al juzgarlo, mientras que Soraya Rodríguez lamentó que se ponga en tela de juicio la actuación de alguien que ha intentado aplicar con rigor la ley de memoria histórica, que «no es un ajuste de cuentas contra nadie, sino un encuentro con nuestra realidad».
Declaración
Garzón deberá declarar mañana en el juicio que se celebra en el Tribunal Supremo por investigar los crímenes del franquismo, a no ser que la sala estime las cuestiones previas planteadas por su defensa y el fiscal y decida archivar la causa.
Con la incertidumbre de saber si el alto tribunal acepta o no las peticiones de nulidad del proceso, Garzón se sentará en el banquillo del salón de plenos del Supremo, a partir de las diez y media de la mañana, para escuchar la respuesta de los siete magistrados que integran la sala y que deliberan, desde la pasada semana, sobre esta cuestión.