El sargento Moya es la primera baja por arma de fuego en esta misión
07 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.La ruta Lithium -vía de comunicación que une las dos principales ciudades de la provincia de Badghis, Qala i Now (sur) y Bala Murghab (norte)- se está convirtiendo en el particular infierno de las tropas españolas destacadas en Afganistán. Ayer, Joaquín Moya Espejo, un militar cordobés de 35 años, perdía la vida cuando colaboraba en las tareas de protección de un transporte de unidades que progresaba por un valle por donde transcurre dicha ruta.
Moya Espejo recibió un disparo cuando repelían un ataque realizado con armas ligeras -no muy lejos de la localidad de Ludina- y dirigido contra las tropas afganas, cuyo avance trataban de garantizar un equipo de instructores españoles, según informaron fuentes del Ministerio de Defensa, que confirman que es inhabitual que un tiroteo se salde con víctima mortal en el bando español, aunque este tipo de situaciones son frecuentes. El sargento primero integraba uno de los denominados OMLT (equipo operativo de asesoramiento y enlace), una de cuyas funciones fundamentales es encargarse de la instrucción de los miembros del Ejército Nacional Afgano (ANA) en las tareas de despliegue en el territorio de la provincia de Badghis, que ocupa el noroeste del país, en la frontera turkmenistaní.
El suceso ocurrió al noroeste de Ludina, cuando una unidad del ANA había tomado una loma, junto al equipo español y un grupo de tiradores de precisión que vigilaban la progresión de las unidades que avanzaban por el valle.
Fue mientras se desarrollaban estas tareas cuando recibieron un ataque lanzado por sorpresa por los insurgentes talibanes con fuego de armas ligeras procedente desde una posición lejana, difícil de prever. En ese mismo momento, el sargento primero Joaquín Moya Espejo fue alcanzado en el tórax gravemente por un disparo, y pese a que el militar cordobés iba equipado con el chaleco antibalas reglamentario.
Evacuación en helicóptero
El militar cordobés gravemente herido fue evacuado de urgencia en un helicóptero del Ejército norteamericano al hospital Role 2 de Bala Murghab, pero en el transcurso del vuelo entró en parada cardiorrespiratoria. La muerte de Moya Espejo fue certificada por los médicos en cuanto fue trasladado -nada más aterrizar- al mencionado centro hospitalario.
El sargento era padre de un niño y estaba destinado en el Regimiento de Infantería Garellano 45, con sede en un acuartelamiento vitoriano. Sus familiares fueron informados, y ya han exigido explicaciones al Gobierno porque consideran que lo que se está dando en Afganistán es una situación de desprotección de los soldados españoles que participan en una misión internacional calificada de paz.
Según Defensa, es el primer militar español que perdió la vida por arma de fuego durante un ataque en los casi diez años de participación de las Fuerzas Armadas en el despliegue en Afganistán, iniciado en el 2002.
La ministra Carme Chacón, que suspendió su visita a El Hierro, volará de inmediato a Afganistán, acompañada por el jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), José Julio Rodríguez, para obtener información de primera mano y agilizar la repatriación del cuerpo.