Rajoy trata de paliar con pactos los posibles retrocesos electorales

R. G.

ESPAÑA

El PP teme una pérdida de votos en Asturias y un ascenso de UPyD en Madrid a su costa.

14 sep 2011 . Actualizado a las 21:45 h.

Mariano Rajoy, fiel a la máxima de más vale prevenir que curar, ha optado por sellar pactos electorales con Unión del Pueblo Navarro y Partido Aragonés para paliar los previsibles ascensos de Unión, Progreso y Democracia, y Foro Asturias a costa del PP.

Mediante estas alianzas, los populares se garantizan la neutralización de los tres o cuatro escaños que pueden perder el 20 de noviembre respecto a los obtenidos hace cuatro años en Asturias.

El acuerdo con los foralistas tiene un doble objetivo, por un lado, impedir que Bildu, reforzada por Aralar una vez desligado de NafarroaBai, se convierta en la primera fuerza en Navarra; y por otro, arañar algún diputado en esa circunscripción gracias a la pujanza de UPN, un objetivo que en solitario sería muy difícil ya que los populares son la cuarta fuerza en la comunidad. En las elecciones del 22 de mayo quedaron por detrás de UPN, PSN y Bildu.

En los comicios de 2008 el reparto fue de dos escaños para UPN, dos para el PSN, y uno para NaBai.

Del mismo modo, el pacto con el PAR asegura la primacía de los populares en las tres provincias, a cambio cede un escaño en el Senado a los regionalistas. En las anteriores elecciones generales, el PSOE ganó en todas las circunscripciones, y el PAR fue la tercera aunque no lograra ni un diputado.

El PP es consciente de que en Asturias va a sufrir un retroceso electoral por la irrupción del Foro Asturias de Francisco Álvarez Cascos. En los comicios del 22 de mayo fue la tercera fuerza por detrás de los casquistas y los socialistas, una posición que puede dejarle con uno o dos diputados por Asturias cuando hace cuatro años consiguió cuatro y empató con el PSOE.

Los populares también esperan un crecimiento de UPyD en Madrid a su costa, aunque creen que el PSOE va a sufrir un serio descalabro que puede equilibrar las posibles fugas al partido que lidera Rosa Díez. No creen, en cambio, que la candidatura que va a presentar el Foro Asturias en la circunscripción madrileña muerda en su electorado.

Rajoy también pretende con estos acuerdos con fuerzas regionalistas acabar con la imagen de un PP aislado e incapaz de pactar con otra fuerza política. Ese fue otra de las consecuencias de la mayoría absoluta de Aznar entre 2000 y 2004, cuando los populares se granjearon la enemistad política del resto de los partidos. El presidente de los populares está empeñado en acabar con esa situación y ha ordenado a la dirección del partido buscar acuerdos con otras fuerzas en todos aquellos lugares donde sea posible.