Cayo Lara rechaza la reforma constitucional y pide referéndum si se hace

EFE

ESPAÑA

El coordinador federal de IU considera que la reforma implica cambiar de raíz el actual modelo económico sólo para favorecer aún más los intereses del capital financiero.

23 ago 2011 . Actualizado a las 17:44 h.

El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha rechazado «con rotundidad» la propuesta de reforma de la Constitución para fijar un techo del gasto realizada por José Luis Rodríguez Zapatero y ha exigido que «la puesta en marcha o no de esta trascendental reforma sea sometida a referéndum».

Para el líder de IU, «reformar la Constitución para establecer un techo de déficit implica cambiar de raíz el actual modelo económico sólo para favorecer aún más los intereses del capital financiero».

Lara, en un comunicado, ha afirmado que el cambio que propone el jefe del Ejecutivo supone «la definitiva unión de valores y objetivos de PSOE y PP para aceptar la imposición de intereses extraños a nuestro país y renunciar a una salida social de la crisis, ya sea la actual o cualquier otra futura».

El dirigente de IU ha pedido a Zapatero que «aclare si ha recibido también una emplazamiento reservado y firme de la Comisión Europea o de alguna de las potencias de la UE exigiéndole la aplicación inmediata de esta medida».

En este sentido, Lara ha señalado que Zapatero «no está en condiciones ni legitimado en este tiempo de descuento que él mismo y Pérez Rubalcaba han decidido que le queda como presidente para hipotecar aún más al país frente a los grandes intereses económicos y los especuladores».

«Aunque sólo sea por respeto a los ciudadanos debería dejar el teatro y las cortinas de humo, y dar explicaciones por su sometimiento a medidas que no ofrecen ninguna salida a la crisis y sí al capital financiero nacional y extranjero», ha asegurado el coordinador federal de IU.

En su opinión, «resulta casi obsceno ver cómo apenas minutos después de que Zapatero hiciera pública su propuesta, desde la derecha se jaleó que él asumiera esta decisión prácticamente como epitafio político y cómo José Bono salió de inmediato a confirmar que aún queda tiempo antes del 20-N para reformar la Constitución siempre que sea para esto».