El Gobierno dice a los Indignados que hay líneas rojas que no se pueden cruzar

Efe

ESPAÑA

Ramón Jáuregui critica las agresiones e insultos a los diputados catalanes.

15 jun 2011 . Actualizado a las 14:59 h.

El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha advertido hoy a los Indignados que se han concentrado frente al Parlamento catalán de las «líneas rojas» que no se pueden traspasar en el debate para mejorar la democracia, como son cuestionar el sistema o deslegitimar a sus representantes.

Jáuregui ha rechazado las «agresiones» e «insultos» a los diputados catalanes frente al Parlament, ha recordado que son los representantes del pueblo, y ha hecho hincapié en que la democracia se puede perfeccionar, pero no sustituir. En su respuesta a una interpelación del diputado de ERC Joan Ridao sobre medidas para profundizar en la credibilidad, transparencia, austeridad y los controles democráticos de las instituciones, Jáuregui ha aludido a las protestas que están protagonizando hoy los indignados frente al Parlamento catalán.

La democracia no tiene alternativa, no hay contramodelo al modelo democrático. Se puede perfeccionar, pero no sustituir», ha proclamado el ministro de la Presidencia.

«Las agresiones e insultos a los políticos son agresiones a representantes del pueblo. Admito la protesta de dos mil, pero quiero recordar a esos dos mil que ha habido 3.200.000 catalanes que han votado a estos representantes», ha recalcado Jáuregui en alusión a los concentrados frente al Parlament.

Ha recordado que los partidos son los que aseguran que la soberanía popular pueda materializarse y que, aunque sus representantes puedan ser «más transparentes» o ejercer su labor «con más proximidad» o «austeridad», no son «sustituibles».

«Son elegidos por el pueblo y esa es la única democracia que nunca deberíamos de cuestionar», ha remachado el ministro.

Ha abogado por «mantener siempre» la demanda de una mayor calidad democrática y enriquecer, modernizar o perfeccionar el sistema pero sin olvidad «nunca» que el debate «no debe de cuestionar la democracia en sí» ni la «legitimidad de sus representantes».

Ha añadido que tampoco se debe «adjetivar» la democracia ni «simplificar» el debate sobre su perfeccionamiento y ha recordado que no hay «fórmulas milagrosas» para reformar la ley electoral. «No hay una ley electoral perfecta», ha apostillado.

Jáuregui respondía así a la interpelación de Erkoreka quien ha mostrado su «más firme rechazo» ante «cualquier intento de coartar el legítimo derecho» de los parlamentarios catalanes de ejercer su labor como representantes de los ciudadanos.

El portavoz de ERC ha recriminado al Gobierno que no haya cumplido una parte sensible de su programa sobre la «regeneración democrática» y ha señalado que «el desencanto» hacia la política «ha tomado voz y forma en las plazas» incluso «traspasando la línea roja de lo que es admisible», en relación a lo ocurrido hoy en Barcelona.

En su respuesta, Jáuregui ha avanzado que el Gobierno presentará, antes del verano, un proyecto de ley sobre la transparencia en la información pública para facilitar el acceso de los ciudadanos al proceso administrativo.

Se trata de un compromiso del Gobierno, ha recordado Jáuregui, que aún debe superar algunas dificultades, como la de que el acceso a la información no interfiera otros derechos o vulnere intereses como el de la seguridad del Estado, la intimidad de las personas o el secreto comercial.

Asimismo, ha señalado que para su puesta en marcha, la administración deberá estar «telematizada en todos sus planos» porque no puede crearse un derecho «que obligue a las administraciones a incrementar sus plantillas sólo para responder a miles de demandas de información».