Dará a conocer sus auditorías a la opinión pública en cuanto estén terminadas.
12 jun 2011 . Actualizado a las 15:47 h.El PP evitará declaraciones alarmistas sobre la situación financiera de las comunidades autónomas, pero no tiene intención de ocultar la verdad de las cuentas y, por ello, dará a conocer sus auditorías a la opinión pública en cuanto estén terminadas.
Así lo han constatado a Efe diversas fuentes del PP, tanto en la sede nacional como en las direcciones autonómicas de aquellas comunidades en las que gobernarán los populares tras estar en la oposición, como Baleares, Cantabria, y previsiblemente, Aragón.
La de contar a los ciudadanos la verdad de la situación financiera de sus comunidades es una decisión que el Partido Popular tiene tomada desde hace tiempo, incluso desde antes del 22-M.
Las fuentes consultadas lo explican así: «Es muy importante ser transparentes sobre las cuentas públicas, porque las medidas económicas que se tengan que adoptar habrá que explicarlas bien a los ciudadanos».
Estas fuentes reconocen que recortes habrá, pero no, en principio, en los servicios sociales.
Donde se prevé «un agujero grande» es en las empresas públicas, el objetivo primero del PP en su afán por el ahorro y por la reducción del déficit.
Una de las fuentes consultadas señala que tanto el déficit como la deuda son conceptos que pueden controlar porque, «con más o menos precisión», están publicados, pero sus augurios se oscurecen cuando hablan de la situación económica de las empresas públicas, de las fundaciones o de los consorcios, pues aquí no hay tanta transparencia.
De ahí, entre otros motivos, la necesidad de encargar auditorías internas.
En Baleares, donde ha cambiado el color político del Gobierno al ganar el popular José Ramón Bauzá, los interventores trabajarán en la auditoría en breve, aunque llevará tiempo terminarla: «no antes de septiembre», apuntan fuentes del entorno del presidente electo.
Lo mismo puede decirse de Cantabria, donde, tras el ciclo del regionalista Miguel Ángel Revilla, tomará las riendas Nacho Diego, del PP.
En Aragón, las negociaciones del Partido Popular con el PAR para formar el nuevo Gobierno de Luisa Fernanda Rudi comenzarán la semana próxima. Una vez concluidas, muy probablemente con éxito para los populares, recalcan fuentes de la dirección autonómica, arrancará el proceso de la auditoría.
Los resultados de los informes los podrán conocer los ciudadanos porque el PP aragonés, con Rudi al frente, se encargará de explicarlos.
Las fuentes del entorno de la candidata popular destacan la importancia de dar a conocer los números financieros de Aragón, puesto que es el modo, dicen, de que la sociedad comprenda una nueva política económica basada en la austeridad y en algunos recortes.
Hasta octubre o noviembre no se sabrá el contenido de la auditoría, apuntan las fuentes consultadas, para las que es esencial este informe si se quieren hacer unos presupuestos realistas.
Ahora bien, cuando el PP exponga ante la opinión pública la situación económica de las comunidades, evitarán el alarmismo, «lo contrario» de lo que hizo el dirigente castellanomanchego Vicente Tirado. Sus palabras no gustaron a muchos barones.
La prudencia se ha impuesto en el partido desde que Rajoy hablara hace una semana con el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, y tres días más tarde con la vicepresidenta, Elena Salgado. Ambos le pidieron contención para no dañar la credibilidad de España ante los mercados.
El líder del PP prometió lealtad, pero insistió en que su partido prefiere decir la verdad. Esa es la consigna.