Portugal vuelve a pagar más para colocar deuda, pese a la petición de rescate

Efe

ESPAÑA

El Tesoro luso consiguió colocar toda la emisión, mil millones de euros, aunque pagó un 19% más que en diciembre.

20 abr 2011 . Actualizado a las 15:41 h.

Portugal ha vuelto hoy a pagar más intereses para financiarse en el mercado primario en su primera emisión de deuda tras la petición de ayuda a Bruselas y al FMI, cuyo equipo sigue en Lisboa inmerso en la negociación del rescate.

El Tesoro consiguió colocar la totalidad de la emisión, 1.000 millones de euros, aunque a cambio de una penalización superior al de las últimas subastas de similares características realizadas en 2010, cuando recurrir a la ayuda externa era todavía una hipótesis y no un hecho consumado.

Portugal pagó un 19% más que en diciembre por su emisión de bonos con vencimiento a tres meses y un 8 por ciento más que hace justo un año por las letras a seis meses: Los títulos a tres meses fueron adjudicados hoy a un interés del 4,046 % (3,403 % la anterior) y los de a seis meses al 5,529 % (5,117 % la anterior).

El dato positivo fue que la demanda superó claramente a la oferta, al duplicarla en el caso de los bonos a tres meses y casi cuadruplicarla en los títulos a seis meses.

La subasta se saldó con un resultado muy similar al registrado ayer por Grecia, que pagó un interés del 4,1 por ciento por sus bonos a tres meses, penalizado por las voces que advierten de la necesidad de acometer una reestructuración de su deuda.

También hoy acudió al mercado España, que colocó 3.537 millones de euros en obligaciones a diez y trece años, aunque con un interés levemente mayor que en la emisión anterior.

La emisión de deuda pública portuguesa refleja que las dudas de los inversores acerca de la situación de su economía no han desaparecido pese a la ayuda que Bruselas y el Fondo Monetario Internacional (FMI) prestarán al país, estimada en cerca de 80.000 millones de euros para los próximos tres años.

El equipo conjunto enviado por la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el FMI continúa en Lisboa para mantener encuentros con los sectores más representativos de la economía y la política lusa.

Tras reunirse con el Ministerio de Finanzas, el Banco de Portugal, los partidos de centro-derecha (los de izquierda rechazaron la oferta) y los sindicatos, hoy fue el turno para las patronales del comercio, el turismo, la agricultura y la industria.

Un portavoz de la CE explicó a EFE que el propósito de estas conversaciones es conocer la opinión de cada uno de los actores sobre la situación del país y las posibles soluciones, antes de comenzar la verdadera negociación con el Gobierno socialista de los términos en que se concede la ayuda y las contrapartidas que se acuerdan a cambio.

Para hoy también está previsto que la troika se reúna con representantes del Observatorio Permanente de Justicia, uno de los sectores candidatos a una reforma estructural, igual que el mercado de trabajo.

Mientras tanto, en el mercado secundario, donde se compran y venden los títulos colocados en emisiones como la de hoy, la presión sobre la deuda también se intensificó hasta penalizar las obligaciones a diez años con un interés del 9,127 por ciento.

Los títulos a cinco años se dirigen peligrosamente al 11 por ciento y alcanzaron ya el 10,778 por ciento, muy lejos del bono germano -utilizado habitualmente como referencia-, y que hoy cotizaba en torno al 2,7 por ciento.

Esta situación, que encarece y dificulta el acceso a liquidez de Portugal, se suma al ambiente de precampaña electoral que se vive en el país, que celebra elecciones legislativas anticipadas el próximo 5 de junio.

La convocatoria de comicios se ha convertido en la salida a la crisis política generada el pasado 23 de marzo, cuando todos los grupos parlamentarios de la oposición, de izquierda a derecha del hemiciclo, decidieron votar en contra del último plan de austeridad elaborado por el Gobierno.

Este rechazo provocó la dimisión del primer ministro, el socialista José Sócrates, quien actualmente ejerce en funciones y vuelve a presentarse a la reelección, aunque va por detrás en las encuestas del líder de la oposición, el liberal Pedro Passos Coelho.