ETA repesca a un terrorista «jubilado»

Melchor Sáiz-Pardo / Colpisa

ESPAÑA

La investigación sobre el comando Erreka obliga a modificar los organigramas de la banda.

17 abr 2011 . Actualizado a las 20:37 h.

La investigación Geografía de los servicios de Información de la Guardia Civil que ha llevado a la desarticulación del comando Erreka y al descubrimiento del mayor arsenal jamás incautado a ETA en territorio español, ha deparado además una sorpresa: la banda terrorista ha repescado a su más veterano terrorista para la cúpula de Lohi, el aparato logístico de la organización y uno de los más importantes para ETA y que con mayor virulencia ha sido golpeado en los últimos años por las fuerzas de seguridad. Se trata de Joseba Iñaki Reta de Frutos, que el próximo julio cumplirá 51 años y que hasta hace dos años y medio se encontraba jubilado, tras haber cumplido catorce años de cárcel.

Los mandos de los servicios antiterroristas no se atreven a precisar si Reta es el máximo dirigente de Lohi, pero sí que es uno de sus más importantes responsables. Los investigadores avalan esta afirmación con el hecho de que Reta, en compañía del que sería su lugarteniente o guardaespaldas, Xabier Goienetxea Irragorri, fueron los liberados que el pasado 18 de septiembre se encontraron con el cabecilla del comando Erreka, el detenido José Aitor Esnaola, en una cita de seguridad en la localidad de Gan, en las cercanías de Pau, para darle instrucciones tras las últimas caídas de miembros de la banda.

Los diez años de pesquisas de la Guardia Civil sobre el comando Erreka -recuerdan estas fuentes- han demostrado que Esnaola y el otro miembro del talde, el huido Andoni Goikoetxea, por motivos de seguridad no tenían contacto con otros comandos para evitar las detenciones en cascada. Dependían directamente de la dirección logística y de la cúpula militar y exclusivamente se reunían con los cabecillas de ETA, como así hicieron durante la última década con jefes terroristas tan destacados como Juan Antonio Olarra Guridi, Ibon Fernández Iradi, Susper, o José Antonio Aranibar. La cita en Gan «deja lugar a pocas dudas sobre el actual papel de Reta en la organización», explicaron este domingo fuentes de la investigación.

La última pista sobre el veterano terrorista data de las pasadas navidades, cuando quemó en un bosque del departamento de Allier, en el centro de Francia, el coche con el que dos meses antes había acudido a la cita con Esnaola. Ese vehículo había sido robado en junio de ese mismo año en el departamento de Cher, también el centro del país vecino.

Más de dos años

Joseba Reta entró en los listados de los terroristas más buscados del Ministerio del Interior en febrero de 2009, poco después de que el 21 de diciembre del año anterior anunciara en las páginas de Gara, junto a otros nueve activistas, que daban el salto y que desde ese momento volvía a militar en la organización armada. El veterano terrorista, uno de los cuatro que apareció con el rostro descubierto en su presentación en el diario , ya cumplió catorce años de condena -entre 1982 y 1996- por pertenencia al comando Mugarra de ETA y la colocación de varias bombas en instalaciones eléctricas.

Tras sus salida de la cárcel, Reta se integró en el entramado legal de la banda. Fue detenido en 2002 acusado de coordinar, junto a otras personas, la huida de distintos miembros de ETA tras la ejecución de atentados, pero quedó en libertad con una fianza de 10.000 euros. Estuvo en la cúpula de la ilegal Gestoras-Pro Amnistía y en eeptiembre de 2008, en la misma sentencia en la que la Audiencia Nacional acordó la disolución de Askatasuna y Gestoras, fue condenado, junto a otras cinco personas, a ocho años de cárcel por integración en organización terrorista por continuar liderando el colectivo clandestino de apoyo a los presos. Fue entonces cuando huyó.

Por su parte, Xabier Goienetxea está huido desde que en 2008 el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande Marlaska ordenara varias redadas contra la organización juvenil radical Segi en las que fueron detenidos una veintena de individuos en Guipúzcoa acusados de actos de violencia callejera. Aquel operativo logró desmantelar dos células de kale borroka con base en las localidades de Rentería y Oiartzun, pero Goienetxea, que era uno de los capos de los grupos de Rentería, logró huir. Goinetxea, como Reta, era parte del grupo que anunció públicamente su incorporación a ETA en diciembre de 2008.