Sortu elude condenar todos los atentados de ETA y exigir su fin

Melchor saiz-pardo MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Tras registrar sus estatutos en Interior, se limita a renegar de la violencia

10 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

En esta ocasión, y por primera vez, sí hubo preguntas, aunque los organizadores no las tenían, ni mucho menos, previstas. El portavoz del nuevo partido de la izquierda aberzale, el catedrático de la Universidad del País Vasco Iñaki Zabaleta, minutos después de registrar los estatutos de Sortu en el Ministerio del Interior, insistió en que su partido «rechaza absolutamente todo tipo de violencia, incluida y particularmente la de ETA». Sin embargo, eludió una y otra vez -hubo hasta cinco preguntas consecutivas- responder si su formación va a exigir a la organización terrorista que abandone las armas para siempre. A pesar de la insistencia, no quiso condenar a ETA de forma expresa, aunque introdujo una nueva expresión: «Renegar de la violencia». Tampoco reprobó los más de 800 asesinatos perpetrados por la banda armada.

Con el respaldo del Sinn Féin irlandés, que envió a Alex Maskey, miembro de su comité ejecutivo, para escenificar su apoyo al proyecto recién nacido, Zabaleta presentó el nuevo partido en Madrid ante una multitud de medios nacionales e internacionales. El portavoz aberzale midió, y leyó, cada una de sus palabras hasta que se vio sorprendido por una avalancha de preguntas que no pudo evitar.

Convencimiento íntimo

A la pregunta de si exigirán a ETA que desaparezca, respondió que «Sortu es un proyecto nuevo absolutamente, que nace de una ruptura con el pasado, que reniega de la violencia, que rechaza la violencia y no la acepta en absoluto, ningún tipo de violencia». Se le cuestionó entonces la credibilidad que tendrá Sortu si no pide a ETA que entregue las armas. La respuesta de Iñaki Zabaleta fue que «solo pedimos una oportunidad para ganar esa credibilidad. La credibilidad crece, se crea, se gana».

A la pregunta de si condenarán los atentados ya cometidos, la contestación fue agarrarse de nuevo a la letra del guión previo: «Rechazamos absolutamente todo tipo de violencia, incluida y particularmente la de ETA». Zabaleta desveló entonces por qué no iba más allá: «Es eso lo que establece el marco legal actual vigente con las últimas modificaciones». Y negó que el rechazo de la violencia sea solamente un trámite para acatar la ley. «El convencimiento es íntimo de todo el grupo de promotores [de Sortu], de toda la sociedad vasca, incluida la izquierda aberzale, es de ruptura total con el pasado, de una nueva realidad. El convencimiento es íntimo, pero íntimamente ético», fue la réplica.

A continuación se le interpeló si se reunirán con las víctimas de ETA. «Entiendo la pregunta, la acepto; es importante, es relevante, pero en estos momentos, justo cuando hemos presentado los estatutos, no podemos avanzar nada más», respondió, ya azorado, el catedrático de Periodismo, que en varias ocasiones intentó dar por concluida la improvisada rueda de prensa en la que se había convertido la presentación sin preguntas de los estatutos. Zabaleta tampoco desveló si Sortu presentará listas en todos los municipios vascos y navarros. «No es el lugar ni el momento para hablar de ello», se defendió.