El PP cree que ganará en todas las comunidades cuyo gobierno se renueva en los comicios de mayo

El PP aplazará su batalla por adelantar las generales para centrarse en los comicios autonómicos y municipales de mayo. Una cita en la que, por primera vez en la historia del partido, cuenta con «posibilidades reales» de lograr la presidencia de todos los Gobiernos regionales que se pondrán en liza, según los datos que maneja la directora de campaña, Ana Mato, que ayer se reunió con su equipo para trazar la hoja de ruta del cuatrimestre. También se constató la probabilidad de que el PP se haga con las alcaldías de la mayoría de capitales de provincia.

¿Euforia? Los miembros de la dirección nacional repiten, como un mantra, que hay que convertir las benignas encuestas en victorias. Mariano Rajoy, pese a que los sondeos le otorgan 18 puntos sobre Zapatero, insiste en que «no se ve» como presidente del Gobierno. Esperanza Aguirre, a la que las prospecciones también otorgan una amplia mayoría absoluta, insistió ayer en que «no hay nada ganado».

En Génova no tienen dudas de repetir éxito en las autonomías de Madrid, Valencia, Murcia, Castilla y León, La Rioja, Ceuta y Melilla, donde ya gobiernan. El partido aún no hizo oficial la designación de sus candidatos, pero sí fueron ratificados en público por Rajoy, incluido Francisco Camps. Los populares ultiman su estrategia para asaltar feudos históricos del socialismo como Castilla-La Mancha o Extremadura, pese a que María Dolores de Cospedal y José Antonio Monago tienen como rivales a dos potentes barones como José María Barreda y Guillermo Fernández Vara. Todo parecía indicar que pondrían una pica en Asturias, antes de la irrupción de Cascos. Pese a ello, los populares no renuncian al Principado ni a Navarra, donde Santiago Cervera tendrá que luchar contra UPN, tradicionales socios del PP. Más cercano, según el diagnóstico popular, estaría triunfar en Aragón, Baleares, Canarias e, incluso, Cantabria.

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