Aguirre se burla del pacto ante Rajoy

ESPAÑA

La presidenta madrileña propone que el Gobierno entregue al PP los ministerios de Trabajo y Economía, y Zapatero solo ve posibilidad de acuerdo con CiU y PNV

23 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

A poco más de 48 horas de que arranque la negociación, el pacto de Estado entre el Gobierno y el PP contra la crisis se puede dar por abortado a juzgar por las declaraciones de los principales dirigentes socialistas y populares. Por si el propio Rajoy o la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, no hubieran dejado claro su escepticismo en torno a la posibilidad de un acuerdo, ayer fue la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien se encargó de darle la puntilla al consenso. «Si quieren pactar, que nos den el Ministerio de Economía y el de Trabajo, que hemos demostrado que sabemos hacerlo. Otra cosa no sería pactar», dijo Aguirre ante el comité ejecutivo del PP.

Una vez más, Aguirre desafiaba así a Rajoy fijando condiciones maximalistas antes incluso de que el líder del PP pueda responder a las hipotéticas ofertas del Gobierno. «Es el momento de plantarle cara al Gobierno con esto de los pactos», insistió la presidenta madrileña ante la cúpula popular. Aguirre propuso incluso los nombres de las personas que deberían ocupar esos ministerios: Javier Arenas el de Trabajo y Cristóbal Montoro el de Economía.

Lo cierto es que en esta ocasión la opinión de Rajoy, que tachó de «patada hacia adelante» el intento de pacto por parte del Gobierno, coincide más con la de Aguirre que con la de otros líderes del PP que pidieron al dirigente popular que conceda una posibilidad al consenso. Así se pronunciaron ayer en el comité ejecutivo barones del PP como la aragonesa Luisa Fernanda Rudi o el riojano Pedro Sanz, que pidieron a la dirección del PP un esfuerzo negociador.

Pero Rajoy dejó claro que no espera nada. El Gobierno, a su juicio, no tiene «ninguna fiabilidad» a la hora de plantear un acuerdo. «La comisión es una patada hacia delante esperando a que escampe y genera confusión», insistió. Ya en un tono más institucional, Dolores de Cospedal afirmó luego ante los medios que para el PP hay cinco puntos «innegociables» para un pacto, que son la bajada de impuestos, la reducción del gasto público, la reforma del sistema financiero, la reforma labora y el mantenimiento de la estabilidad presupuestaria.

Por su parte, los mensajes que emite el PSOE también invitan al pesimismo sobre un pacto entre los dos grandes partidos. Tras culpar del incremento del paro al urbanismo salvaje de la época de Aznar, Zapatero abandonó ayer el tono mitinero de Málaga e insistió en que el Gobierno va a poner «todo el empeño» para lograr un acuerdo contra la crisis que incluya a todos los partidos, «por supuesto también con el PP». Lo dijo en rueda de prensa conjunta con el primer ministro turco, Erdogan

Poco antes había prometido ante la ejecutiva socialista emplearse «a fondo» en el diálogo social y político y reafirmado su voluntad y determinación para llegar a acuerdos. Pero al mismo tiempo, hizo hincapié en la necesidad de intentar por todos los medios comprometer a los partidos pequeños, en referencia a CiU y PNV, para que se vea claro que el PP no está por la labor de acordar nada y tan solo quiere sacar rédito de la crisis, según fuentes socialistas.

Algunos miembros de la Ejecutiva del PSOE recordaron que el Gobierno ya hizo una propuesta de pacto en la pasada Conferencia de Presidentes que las comunidades del PP se negaron a aceptar, siguiendo las consignas de la calle Génova.

Más dura fue en la rueda de prensa la secretaria de Organización, Leire Pajín, que acusó a Mariano Rajoy de no dar «ni palo para aportar una sola idea», sino de «poner todos los palos en la rueda para impedir que el país salga de la crisis económica».