ETA intentó asesinar a Aznar con un misil tierra-aire tres veces en 13 días

Alfonso Torices

ESPAÑA

El etarra Pedro María Olano ha confesado el plan y el juez Grande-Marlaska da crédito ?a su testimonio

13 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

ETA quiso asesinar en el 2001 al entonces presidente del Gobierno, José María Aznar, tres veces en 13 días. Un comando intentó derribar con un misil tierra-aire el avión en que viajaba el gobernante en las tres ocasiones que Aznar se desplazó al País Vasco para participar en los actos que el PP organizó en la campaña para las elecciones autonómicas vascas del 13 de mayo del 2001. El magnicidio se frustró en todos los intentos, ejecutados entre el 29 de abril y el 11 de mayo, por defectos en el lanzamisiles que impidieron a los terroristas disparar el proyectil.

El fracaso del crimen de Estado fue desvelado en mayo pasado por la dirección de la organización terrorista, pero los detalles y la confirmación de sucedido no se conocieron hasta ayer, cuando Pedro María Olano, el etarra detenido el jueves pasado en el municipio guipuzcoano de Lizarza, ha explicado los entresijos de la operación. El miembro de ETA detalló a la Guardia Civil los planes para asesinar a Aznar y su participación en ellos. El juez Fernando Grande-Marlaska, el instructor de la Audiencia Nacional que lo ha enviado a prisión, ha dado credibilidad a su confesión porque, según reseña en el auto de prisión, está corroborada por otros datos e indicios.

El detenido explicó que en los primeros meses del 2001 formaba parte de un grupo de ETA, con base en esta comarca guipuzcoana, que se dedicaba a viajar a Francia, cuando era requerido por la dirección logística de la organización, para trasladar a España y entregar a los comandos armas y explosivos.

Su primera misión consistió en desplazarse a Guethary, muy cerca de la frontera con España, para recoger un lanzamisiles SAM-7, de fabricación rusa, y entregárselo en un paraje montañoso del pueblo guipuzcoano de Hernani a los miembros del comando que trataría de asesinar a Aznar durante las operaciones de despegue o aterrizaje del avión presidencial en los viajes que tenía previsto hacer al País Vasco con motivo de la campaña autonómica del 2001, en la que tuvo una muy activa participación en apoyo del candidato del PP, Jaime Mayor Oreja, quien estuvo cerca, con el respaldo del socialista Nicolás Redondo Terreros, de desbancar al lendakari nacionalista Juan José Ibarretxe. El primer intento se abortó, por fallos en el arma, cuando el presidente acudió el 29 de abril al palacio Euskalduna de Bilbao para el acto de apertura de la campaña del PP.

Olano y sus compañeros tuvieron que regresar a Francia con el lanzamisiles y entregárselo a los responsables del atentado, pero el instrumento falló siempre que se volvió a intentar disparar. La segunda vez fue en los alrededores del aeropuerto guipuzcoano de Fuenterrabía, cuando el 4 de mayo Aznar acudió a un mitin en el Kursaal donostiarra. Nuevo desplazamiento a Francia para reparar el arma y regreso a España. La tercera intentona fue el 11 de mayo en el aeropuerto alavés de Foronda, el día que Aznar voló a Vitoria para el acto de cierre de campaña.