El hijo de Adolfo Suárez afirma que es «evidente» que Rajoy no es un buen candidato a la Moncloa

ESPAÑA

En una polémica entrevista recuerda que ha perdido un millón de votos

18 dic 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Dos días después de que el líder popular Mariano Rajoy anunciase que han terminado las tensiones internas del PP -derivadas principalmente de la trama corrupta del caso Gürtel-, unas polémicas declaraciones de un militante de postín han caído como un jarro de agua fría en la sede popular de Génova. En las páginas del último número de la revista Vanity Fair Adolfo Suárez Illana, hijo del que fuera primer presidente de la democracia, considera «evidente» que Mariano Rajoy, no es un buen candidato para llegar algún día a la Moncloa porque, además de haber perdido un millón de votos desde que es presidente del PP, «no está generando ilusión», señala. En la entrevista Suárez Illana habla además de traiciones y deslealtades, de la relación entre su padre, Adolfo Suárez, y el Rey y de la falta de liderazgo de Rajoy en el PP, partido en el que sigue militando.

«Es evidente que [Rajoy] no» es un buen candidato para el PP, opina el que fuera candidato por este partido a la presidencia de Castilla-La Mancha, al ser preguntado por ello. Añade que «sinceramente» cree que «el PP, hoy en día, no está generando ilusión» y añade: «Si el otro lo hace mal, nosotros lo estamos haciendo peor».

Camps y Costa son honestos

Sobre si pondría la mano en el fuego por el presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, Suárez dice que «es un hombre honesto que fue engañado por Álvaro Pérez, el Bigotes», un tipo al que, señala, conoció en campaña y del que tuvo la «intuición» de que no debía de fiarse, informa Efe. También se refiere a la forma en que Ricardo Costa, ex secretario general del PP valenciano, fue apartado de su cargo y del partido. «Creo que Costa es honesto y a día de hoy dudo de que haya cometido alguna falta de honradez o de que se haya llevado absolutamente nada». Y, por ello, entiende que el PP debería haber tenido hacia él la misma lealtad que los militantes deben al partido, a la vez que defiende que esta formación despeje «cualquier tipo de duda» sobre la honestidad de Costa porque «es importante que nadie se pueda sentir tirado o abandonado».

Por otra parte, Suárez Illana señala que su padre tenía «contadísimos y escasísimos» amigos y que, de hecho, llegó un momento de su vida en el que «no se fiaba ni de sí mismo», porque estuvo durante muchos años en un entorno «muy hostil» y vio y vivió «la traición en primera persona de una forma permanente», aunque evita dar nombres de las personas que lo traicionaron.