Halladas seis fosas, entre ellas la posible de Lorca, que se excavarán de inmediato

Andrés Cárdenas

ESPAÑA

Por expreso deseo de sus familias, no se identificará ni al escritor ni a Dióscoro Galindo.

16 oct 2009 . Actualizado a las 20:06 h.

Hasta ahora, lo único que se sabe sobre los restos del poeta García Lorca es que su búsqueda será larga y que deberán de ser analizados miles de huesos antes de dar unas conclusiones definitivas. Lo demás son todo conjeturas y misterios que comenzarán desvelarse a partir de este viernes, que es cuando se ha firmado el convenio para empezar la excavación en el Parque García Lorca de Alfacar y el protocolo que da 'luz verde' a la búsqueda de la tumba en la que supuestamente se encuentra el poeta junto a varias personas más. Por lo pronto se comenzará por abrir cuatro fosas en un entorno de 300 metros en las que los radares de los expertos del Instituto de Geofísica de Granada han detectado 'sombras' que pudieran corresponder a restos humanos. En una de esas fosas podrían estar los huesos del poeta junto a los del resto de los asesinados aquella fatídica noche del 18 al 19 de agosto de 1936 cuyos familiares quieren encontrarlos para hacerles un funeral digno, cosa que no pudieron realizar en su día.

Hasta la semana pasada, por el citado parque ubicado entre las localidades de Víznar y Alfacar, lugar de culto para todos los amantes de la poesía de Lorca, se podía pasear libremente. Grupos de personas y turistas iban diariamente en busca del áurea del poeta. Sin embargo, desde la pasada semana allí sólo se puede entrar con una autorización: se busca al poeta.

La intervención de la Junta de Andalucía en el proceso se inició a raíz de la petición cursada por los familiares de tres de los fusilados que supuestamente yacen en la misma fosa común que el poeta, cuyos descendientes, por contra, no son partidarios de la exhumación. En numerosas ocasiones, los familiares de García Lorca han dicho que prefieren que los restos de su antepasado sigan en el lugar en el que están enterrados y han aconsejado que aquel sitio se convierta en un cementerio para recordar a los cientos de muertos que por allí fueron fusilados durante la Guerra Civil. Sin embargo, algunos familiares y asociaciones que representan al resto de los fusilados con el poeta sí quieren que la fosa sea abierta.

García Lorca fue supuestamente enterrado con el maestro republicano Dióscoro Galindo -cuya exhumación no será finalmente atendida por la Junta al existir opiniones contrarias en el seno de la misma familia- y con los banderilleros anarquistas Francisco Galadí y Joaquín Arcollas. Aunque, según se ha conocido recientemente, junto a ellos también podrían estar enterrados el inspector municipal de tributos Fermín Roldán y el restaurador granadino Miguel Cobo Vilches, cuyas familias se han sumado a la petición de apertura de la fosa.

Se sabe que entre las localidades de Viznar y Alfacar hay cientos de muertos, aquellos que durante la Guerra Civil eran llevados hasta allí para ser ejecutados. Que hay muchas más fosas alrededor del citado Parque García Lorca es algo que se da por hecho desde hace tiempo. Pero los primeros enterramientos (entre ellos el de Lorca, el maestro y los banderilleros) se produjeron en el entorno de Fuente Grande. Por dos motivos, uno porque por allí la tierra era más blanda y otro porque está el testimonio de al menos dos testigos que hace años declararon que en el mes de agosto del 36 se fusilaron entre 15 y 20 personas a cien metros del lugar que llaman Fuente Grande. Uno de esos testimonios lo dio en los años cincuenta Manuel Castilla, el hombre que supuestamente enterró al poeta y se lo contó primero a Agustín Penón y después a Ian Gibson, que investigaron en profundidad lo ocurrido aquella noche en que mataron a García Lorca.

Varias teorías

Sin embargo, hay más conjeturas en cuanto a otras fosas que pueden contener los restos del poeta. Algunas tan peregrinas como la que apunta que los restos del poeta fueron sacados en 1945 y llevados al Valle de los Caídos. Hay quién ha escrito que el padre de Federico García Lorca dio 300.000 pesetas de la época a las autoridades militares para que le permitieran desenterrar a su hijo del lugar donde fue asesinado para llevárselo a la Huerta de San Vicente. Otras investigaciones apuntan a que días después del asesinato de Lorca, del maestro y los dos banderilleros, el cadáver en concreto del poeta fue desenterrado y trasladado a una fosa común que hay cerca de un lugar llamado 'El Caracolar' para evitar que fuera encontrado por las tropas republicanas. Pero hay más.

Otras teorías e historias recogen la exhumación posterior al asesinato y que van desde quienes sitúan el enterramiento en plena Vega de Granada hasta quienes plantean que los restos de Lorca se encuentran en una finca familiar en Nerja, una vez alcanzado un acuerdo con Franco.

De ahí la expectación, lo mismo que existe con lo que pasará a partir de la firma del convenio. Por lo pronto, los trabajos de excavación se ceñirán a unos 300 metros cuadrados. En este círculo se encuentra, según la teoría más extendida, la fosa del poeta. El 25 de septiembre, un investigador llamado Luis Avial, de la empresa Cóndor Geo-radar, escaneó la zona asociada con el enterramiento y encontró a través de las ondas de su radar anomalías compatibles con restos humanos. Por las dimensiones registradas, los cuerpos pudieron ser enterrados en parejas. Pero este trabajo también decía que la tierra pudo haber sido removida unos días después del enterramiento, lo que da pábulo a los rumores sobre su posible exhumación.

Sin embargo, este trabajo difundido por varios medios de comunicación, molestó a la Junta de Andalucía, no lo consideró válido, calificó de intruso al investigador y a partir de ahí decidió balizar el terreno y establecer un perímetro de seguridad.

Por eso todo está por ver. Incluso cual será la postura final de los familiares de García Lorca. Ellos no han pedido la apertura de la fosa y por lo tanto pueden negarse a que los restos de su antepasado sean identificados. Podrán hacerse los de aquellos fusilados cuyos familiares lo han pedido, pero no los de García Lorca. Lo que pase a partir de hoy, sin duda despejará muchas incógnitas. El misterio sobre la muerte de uno de nuestros poetas más universal, sino el que más, se podrá conocer 73 años después.