ETA repesca a un terrorista jubilado y a dos peligrosos jefes de la violencia callejera para su nueva ofensiva

Melchor Saiz-Pardo

ESPAÑA

23 feb 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

ETA ha renovado su vanguardia y lo ha hecho repescando a un terrorista jubilado y a un par de destacados jefes de la violencia callejera, a los que las fuerzas de seguridad consideran especialmente peligrosos. A ellos se han unido una dirigente de Batasuna, un portavoz del colectivo de familiares de presos y un activista legal huido, el único de todos ellos con experiencia reciente en comandos.

La Comisaría General de Información de la Policía y la Jefatura de Información de la Guardia Civil han incluido en las últimas horas sus nombres en la lista de los miembros de ETA más buscados y han comenzado a distribuir sus fotografías y filiaciones por todas las comisarías y comandancias. Según explicaron mandos de la lucha antiterrorista, al menos cuatro de los seis nuevos integrantes de la banda son parte del grupo de diez huidos que el pasado 21 de diciembre anunciaron al periódico Gara que daban el salto y que desde ese momento pasaban a militar en la organización armada.

El más veterano de las seis nuevas caras etarras es Joseba Iñaki Reta de Frutos, de 49 años y natural de Elorrio. Este terrorista, uno de los cuatro que aparecieron con el rostro descubierto en su presentación en el diario independentista, ya cumplió catorce años de condena por pertenencia al comando Mugarra de ETA y la colocación de varias bombas en instalaciones eléctricas.

Tras su salida de la cárcel, Reta se integró en el entramado legal de la banda. Fue detenido en el 2002 acusado de coordinar, junto a otras personas, la huida de distintos miembros de ETA tras la ejecución de atentados, pero quedó en libertad con una fianza de 10.000 euros. Estuvo en la cúpula de la ilegal Gestoras-Pro Amnistía y en Septiembre del 2008 fue condenado, junto a otras cinco personas, a ocho años de cárcel por integración en organización terrorista por continuar liderando el colectivo clandestino de apoyo a los presos. Fue entonces cuando huyó.

Las inquietudes en Interior

El salto de Reta a Francia para integrarse en la banda es, según los mandos de la lucha contra ETA, «más propagandístico que operativo». Al Ministerio del Interior le preocupa mucho más la entrada en las filas de la organización de Xabier Goienetxea Iragorri y Oritz Gurrutxaga Gogorza. Ambos están huidos desde que el pasado año el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande Marlaska ordenó varias redadas contra la organización juvenil radical SEGI, en las que fueron detenidos una veintena de individuos en Guipúzcoa acusados de actos de violencia callejera.

Otro de los nuevos etarras liberados que inquietan a los servicios de Información es Ignacio Lerín Sánchez. Este terrorista está huido desde que en marzo del 2007 la Guardia Civil desarticuló el complejo Donosti de ETA con la captura de siete de sus miembros. Lerín es hermano del cabecilla de aquel comando y responsable del explosivo, José Ángel Lerín Sánchez. Este grupo había recopilado información suficiente para atentar contra el filósofo y escritor Fernando Savater, un policía nacional de San Sebastián, dos ertzainas de la localidad guipuzcoana de Tolosa y un confidente de la Guardia Civil.