El nuevo PP navarro echa a andar con el objetivo de superar el «localismo foralista»

Carlos Calvo

ESPAÑA

08 nov 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Después de 17 años de ausencia en Navarra, el PP comenzó ayer su proceso de refundación en la comunidad foral, una vez roto el pacto que mantuvo con UPN desde 1991. La presentación del PP de Navarra corrió a cargo del presidente de la gestora, el senador José Ignacio Palacios, porque Mariano Rajoy viajaba a esa hora hacia la Línea de la Concepción, donde participó en una concentración contra los vertidos en el estrecho de Gibraltar.

Palacios estuvo arropado por los parlamentarios Santiago Cervera, José Cruz Pérez Lapazarán y Javier Pomés, que como él abandonaron UPN para afiliarse al PP, convencidos de que la defensa de la identidad navarra no puede hacerse desde el mero «localismo foralista o la visión política a corto plazo». Como principio definitorio, aboga por la derogación de la disposición transitoria cuarta de la Constitución, que deja la puerta abierta a la incorporación de Navarra al País Vasco y que los populares pretenden impedir.

Tras la aprobación de una declaración de principios, la comisión constituyente del PP se presentó a los medios de comunicación en un hotel porque la organización no dispone todavía de sede propia. Cuando culminen las gestiones para el alquiler de un local en el centro de la capital navarra, será Mariano Rajoy quien inaugure las instalaciones.

Palacios aseguró que el proyecto que preside tiene «vocación de permanencia» y nace con el propósito de ser «la primera fuerza política de Navarra a corto y medio plazo». La gestora, formada por 34 miembros, se propone celebrar el primer congreso del partido en un plazo de tres a seis meses y empieza con una militancia de 402 afiliados. En esta primera reunión, los constituyentes aprobaron una declaración de principios que establece la base política e ideológica del nuevo partido bajo el compromiso «Por Navarra, con España, en Europa».

En su documento ideológico, el PP se presenta como el partido de centroderecha que pretende «recuperar la iniciativa política y cultural en Navarra» para evitar que formaciones de la misma ideología, en alusión a UPN, se conviertan en «rehenes» de otras opciones políticas, en referencia a los socialistas. Este pronunciamiento no excluye futuras alianzas con el antiguo socio e incluso las contempla expresamente. «Estaremos siempre abiertos -dice- a los pactos con otras fuerzas políticas, siempre que se respete nuestro compromiso con Navarra y sus ciudadanos».