El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se mostró ayer inflexible en todo lo concerniente al recurso judicial para impedir la consulta popular impulsada por el lendakari Juan José Ibarretxe y aprobada por la mínima en el Parlamento vasco. Rodríguez Zapatero rechazó la petición del PNV, que, a través de su portavoz parlamentario, Josu Erkoreka, le reclamó que retirase la petición cautelar de suspensión del referendo, acordada por el Tribunal Constitucional a petición del Ejecutivo mientras resuelve sobre el fondo del recurso.
El presidente, con el que charló en la Moncloa durante una hora y media, dejó claro que esa decisión ya es inamovible. El diputado vasco calificó de ventajismo legal la posibilidad que tiene el Gobierno de paralizar cualquier ley autonómica mientras el Constitucional resuelve el conflicto. Cree que es un medida de dudosa constitucionalidad.