Mariano Rajoy era consciente de que las duras intervenciones de ayer podrían hacer mucho daño si llegaban a los periódicos, a pesar de tratarse de una reunión a puerta cerrada. Por ello, el líder del PP pidió en su discurso prudencia en las críticas e hizo también un llamamiento a la unidad por encima de las discrepancias. Confiado pero prudente, Rajoy dijo creer que cuenta con el «apoyo sincero de la mayoría» pero, en una de sus frases, matizó que eso «no es lo mismo que tener el apoyo de la mayoría». Frente a lo que se le reprocha, insistió en que no ha habido «ningún cambio» de principios en el PP y pidió que se le juzgue por lo que ha dicho y hecho hasta ahora y no por lo que se dice que hará en el futuro. Admitió que hay «diferencias» entre los dirigentes del PP, pero insistió en que hay coincidencia «en lo fundamental». Auguró en todo caso que haga el equipo que haga, en el congreso de junio recibirá críticas. «No podemos reducir la agenda del PP a dos temas», dijo a la conclusión de una reunión que, pese a las diferencias de criterio, calificó de «muy útil».
En esa misma idea abundó el presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, presidente del comité organizador del congreso, que calificó de «extraordinariamente positivo y enriquecedor» el tono de las intervenciones que, a su juicio, «no tienen mucho que ver con lo que podamos haber oído, leído o interpretado a lo largo de las últimas semanas». Aseguró que todos los que tomaron la palabra lo hicieron, «sin excepción alguna, con el compromiso firme de aumentar los apoyos, de cerrar filas una vez que el congreso haya acabado, sea quien sea el ganador».
Apoyo a Rajoy
Pese a ello, Valcárcel mostró claramente su apoyo a Rajoy y dejó entrever su posición crítica con los que censuran al líder. «No entiendo por qué tenemos que entrar en debate sobre lo que no se ha hecho», dijo en referencia a las intervenciones que apuntaban a un abandono de los principios. «Soy murciano, no marciano, llevo en el PP 26 años y en esto de los principios me parece respetable que cada cual opine, pero quienes entendemos que los principios siguen inalterados también tenemos derecho a expresarlo», afirmó, y aseguró que eso es compartido «por el 99,9% de la militancia del PP en España».
El líder del PP de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, juzgó también positivo el debate, porque «cuando uno da su opinión de forma clara y sin ambages es lo mejor que se puede hacer». Feijoo resumió la reunión diciendo que «la inmensa mayoría hemos dicho muy claramente que nos parecía que Rajoy tiene que seguir en su apuesta por liderar el partido», mientras que hubo «tres o cuatro compañeros que dijeron que había cosas que no estaban bien y que habría que mejorar».