Rosa Díez estrena partido arropada por Vargas Llosa

Colpisa

ESPAÑA

Unión, Progreso y Democracia se postula como garante de la unidad de España y alternativa al bipartidismo.

29 sep 2007 . Actualizado a las 19:23 h.

Unión, Progreso y Democracia (UPD), el nuevo partido creado por la ex eurodiputada socialista Rosa Díez y el filósofo Fernando Savater, ha sido presentado en Madrid, apadrinado por el escritor hispano-peruano Mario Vargas Llosa, el último fichaje estrella de la recién nacida formación. Ante un millar de simpatizantes entregados, UPD se comprometió a «regenerar la democracia secuestrada por los grandes partidos» y a «defender sin complejos el degradado orden constitucional».

Además de Vargas Llosa, que no dudó en culpar a Rodríguez Zapatero del «auge de los nacionalismo periféricos que resquebrajan el consenso de la transición», el acto contó con la presencia del dramaturgo Albert Boadella, el ex secretario general de la UGT Nicolás Redondo o Albert Rivera, el 'número uno' de Ciutadans de Catalunya, formación que podría presentarse en coalición con UPD a las elecciones generales del año próximo.

La puesta de largo de la UPD tuvo lugar en el Auditórium de la Casa de Campo de Madrid y sirvió al partido para presentar las líneas maestras de su oferta electoral. La formación, que asegura tener ya 3.500 preafiliados, se autoproclama garante de la unidad de España y pretende ser una alternativa al bipartidismo PP-PSOE.

De la izquierda, explicaron sus promotores, se quedan de las ideas progresistas de los socialistas como el matrimonio entre homosexuales o sus posiciones favorables al aborto y a la eutanasia. Con la derecha coinciden en su defensa de la unidad de España. Muestra de ese medio camino entre la izquierda y la derecha es su color corporativo, el magenta, una mezcla entre el rojo de los socialistas y el naranja de los populares.

Savater, que a pesar de ser uno de los principales promotores del partido no figurará en sus listas, no ocultó que la vocación de Unión, Progreso y Democracia es la de convertirse en un «incordio» para las dos grandes formaciones, «desafiando su inercia».

Boadella, por su parte, encajó la nueva formación como un aire nuevo frente a la «inquietante putrefacción de las estructuras políticas españolas».

Nacionalistas y Zapatero

Rosa Díez se volcó en su primera intervención oficial como dirigente de UPD en atacar a los nacionalistas y al Ejecutivo de Rodríguez Zapatero por su respuesta poco contundente a propuestas como la del pasado viernes del lendakari. Según la ex eurodiputada, «el Gobierno socialista no ha dado una respuesta suficiente para poner contra las cuerdas» a Ibarretxe tras su «chantaje» al anunciar una consulta popular.

La ex dirigente socialista, que hizo una encendida defensa de la bandera española que lucía en el escenario, apostó por un Estado «sin complejos», que evite la «destrucción de sus símbolos». Además, anunció que pretende promover una reforma de la Constitución para «delimitar» las competencias estatales y autonómicas y una reforma de la ley electoral para evitar el «excesivo peso» de los partidos nacionalistas en el Parlamento, con el fin de tener un país con «ciudadanos más libres e iguales».