Detenidos tres radicales, dos de ellos menores, en una violenta noche en el País Vasco y Navarra

Joseba García BILBAO

ESPAÑA

21 ene 2007 . Actualizado a las 06:00 h.

Al menos tres jóvenes, dos de ellos menores de edad, fueron detenidos durante la noche del sábado y la madrugada de ayer por las fuerzas de seguridad por su presunta participación en actos de violencia callejera en diferentes puntos del País Vasco y Navarra, en los que fueron atacadas entidades de ahorro y dos sedes socialistas. Entre tanto, el movimiento pro amnistía amenazó con nuevas movilizaciones como respuesta al auto del Tribunal Supremo que considera que las organizaciones juveniles radicales Jarrai/Haika/Segi forman parte de la banda terrorista ETA. Los incidentes comenzaron a las 18.30 horas del sábado, en San Sebastián, cuando varios individuos hicieron estallar un artefacto casero contra un cajero de la Kutxa que sufrió daños y se prolongaron hasta las 3 horas del domingo, cuando la policía vasca intervino contra una concentración ilegal, en la localidad vizcaína de Munguía. Los violentos respondieron con el lanzamiento de botellas, piedras y otros objetos contra la Ertzaintza, que cargó contra los manifestantes y detuvo a un menor, de 17 años, acusado de participar en desórdenes públicos. Los otros dos arrestados, de 16 y 19 años, protagonizaron incidentes en Navarra. Las cargas policiales se repitieron también en Lequeitio (Vizcaya), donde encapuchados cruzaron barricadas de fuego. En el transcurso de actos de violencia callejera fueron atacadas igualmente con artefactos de fabricación casera la Casa del Pueblo del PSOE en Zumárraga (Guipúzcoa) e Iurreta (Vizcaya). «Hastío y repugnancia» Desde el «hastío y la repugnancia», el delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, condenó los hechos. El número dos del PP vasco, Carmelo Barrio, señaló que el terrorismo callejero es la demostración de que la izquierda radical no está dispuesta a renunciar a la violencia como instrumento para lograr sus objetivos políticos. Por ello, reclamó la vuelta al Pacto por las Libertades y la ilegalización del PCTV.