Cataluña elige hoy al sucesor de Maragall, con el temor de que la abstención se aproxime al 50%

Pablo Carballo
Pablo Carballo LA VOZ | BARCELONA

ESPAÑA

GUIDO MANUILO

31 oct 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

Más de 5.300.000 personas están convocadas a elegir el nuevo Parlament catalán, aunque es muy probable que sean escasamente tres millones quienes ejerzan el derecho. La abstención amenaza con convertirse en una de las principales noticias de hoy, el día en que se empieza a fraguar el nombre del sucesor de Pasqual Maragall al frente de la Generalitat. Algunos analistas estimaron ayer la participación entre unos discretos guarismos del 55% a 60%, aunque hay un factor clave que hace imprevisible este dato: son las primeras elecciones de la democracia en Cataluña que no se celebran un domingo. Es la segunda vez en menos de cinco meses que los catalanes están llamados a las urnas. La ocasión anterior fue el 18 de junio, el día en que se aprobó el Estatut. En aquella ocasión, la participación fue de sólo el 49,4% del electorado. El caso de hoy es diferente. Primero, aunque el tiempo es benevolente, no hará día de playa como entonces. Segundo, el hartazgo causado por la negociación del texto estatutario fue castigado en la votación y hoy parece un asunto claramente superado. Aunque no superar el 50% de participación bien podría considerarse un descalabro de la clase política, las expectativas de los expertos tampoco van mucho más allá. Según algunos, la cita amenaza con superar el registro negativo de 1999, cuando los votantes reales sumaron el 59,2% del censo. En las elecciones del 2003, la participación fue del 63,4%. De cualquier modo, la historia democrática catalana demuestra que las elecciones autonómicas movilizan menos a la población que las generales. Contra esa tendencia han tratado de luchar los candidatos en las últimas horas. Especialmente los de izquierdas, ya que se considera que sus cuerpos electorales son menos disciplinados que los conservadores, por lo que una baja participación perjudicaría más a los primeros. Por otro lado, existe la creencia generalizada de que esas bolsas de votantes, que en las generales votan a la izquierda y en las autonómicas se quedan en casa, se concentran en áreas metropolitanas poco favorecidas. Bajo este prisma se ha interpretado el paseo de Zapatero en el último día de campaña, animando a participar en las calles del populoso cinturón de Santa Coloma de Gramanet. Las cifras Los 5,3 millones de votantes potenciales tienen a su disposición no sólo a los cinco partidos actualmente representados en el Parlament, sino a un total de 70 candidaturas para elegir. Los sufragios -salvo el 2%, correspondiente a residentes fuera de Cataluña- se distribuirán por las 8.135 mesas electorales disponibles en los 916 municipios del territorio catalán. La mayor parte corresponderán a la provincia de Barcelona, que aglutina el 73% del censo electoral. Votantes aparte, las elecciones movilizan hoy en Cataluña a unas 200.000 personas, entre presidentes, vocales y suplentes de las mesas, interventores y apoderados de los partidos y agentes de las fuerzas de seguridad.