Afirma que es «natural» que a veces se bloquee el proceso España y Gran Bretaña instan a la UE a «hacer más» contra la inmigración ilegal
03 oct 2006 . Actualizado a las 07:00 h.El primer ministro británico respaldó ayer el proceso de paz del País Vasco y animó a José Luis Rodríguez Zapatero a superar con paciente determinación los «altibajos» que surjan en el camino hacia la paz. Tony Blair aprovechó su viaje ayer a Madrid para echar una mano al presidente del Gobierno en esta materia: además de brindarle su firme apoyo, realizó una velada crítica al PP al pedirle en público que ignore a quienes le advierten que el proceso fracasará. El líder de los laboristas británicos y el secretario general del PSOE nunca han conectado pese a su aparente afinidad política. En el encuentro que mantuvieron en el angosto palacio de la Quinta de El Pardo, Blair aportó a Zapatero «mucha información» sobre su experiencia en el proceso de Irlanda del Norte, pero no hizo ni dijo nada que pudiera interpretarse como una intromisión en un asunto interno de España más allá de un claro respaldo de su Gobierno a la gestión del Gabinete socialista en el «proceso de paz». Blair hizo una indirecta referencia al parón del proceso cuando habló de su experiencia en Irlanda del Norte. Aseguró que «a veces parece que hay un bloqueo» o que el proceso se desvía del camino que en teoría debería seguir, pero consideró estos baches algo «natural» en conflictos tan prolongados en los que han fallecido tantas personas. «Pero si la voluntad está ahí y la gente aplica una determinación paciente con creatividad e imaginación muchas cosa acaban por seguir cuajando», confió. El PP, por su parte, rechazó cualquier paralelismo entre el proceso de paz abierto por Rodríguez Zapatero tras el alto el fuego de la banda y el que puso fin a las acciones del IRA. Zaplana explicó que su partido siempre ha estado en contra de «la internacionalización» del conflicto etarra, que considera estrictamente reducido al ámbito interno español. Por otro lado, los dos líderes instaron a la UE a acelerar el diseño de su política común para hacer frente al problema de la inmigración ilegal. Los dos mandatarios coincidieron en que los Veinticinco deben abordar de forma conjunta el fenómeno, por ser una de las mayores preocupaciones para sus ciudadanos.