Castilla-La Mancha denuncia la reforma del Estatuto de Murcia para blindar los trasvases
ESPAÑA
Nueva batalla en la guerra del agua . Los partidos con más representación en Castilla-La Mancha, PSOE y PP, critican la próxima reforma del Estatuto de Autonomía de Murcia en lo que se refiere al agua. Según anunció el presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, el texto fijará que la cuenca del Segura es la única estructuralmente deficitaria de España, reconocerá el derecho a que las cuencas excedentarias cedan agua a las deficitarias y establecerá en los trasvases la solución al déficit de agua. Para José Molina, portavoz del Grupo Socialista en las Cortes castellano-manchegas, esta propuesta es «desmedida» y «nunca se aprobará en el Congreso porque es claramente inconstitucional, como lo es el nuevo Estatuto de Valencia que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha recurrido porque no es atribución de una comunidad regular las aguas que discurren por otra comunidad o las que se pueden considerar excedentarias». Según Molina -cuyo grupo tiene mayoría absoluta en el Parlamento- el modelo de desarrollo urbanístico de Murcia es «insostenible porque se planifica en base a un recurso que no tiene» y esta región, al igual que las que se encuentran en la cuenca del Segura, posiblemente sufrirá problemas de desabastecimiento en octubre «porque se ha hecho un uso abusivo del agua con miles de hectáreas de regadíos ilegales, campos de golf y urbanizaciones». Desde el PP, Juan José Alcalá, alcalde de Sacedón (Guadalajara), uno de los municipios de la cabecera del Tajo desde la que parten los trasvases al Segura, también critica al Gobierno murciano. Según Alcalá, «no existe la solidaridad entre las regiones y todos quieren blindar los ríos como si fueran de ellos cuando son de todos los españoles». «La solución está en desarrollar un auténtico Plan Hidrológico Nacional con sentido común para no consentir que miles de litros de agua se tiren al mar cuando en muchas zonas de España hay sed», añadió.