Los obispos no emitirán un texto pastoral sobre la unidad de España

Rafael Herrero MADRID

ESPAÑA

En el plenario, que se inicia hoy, publicarán una reflexión sobre la situación sociopolítica Tampoco harán pública su postura sobre la tregua de ETA ni el plan de paz del Gobierno

20 jun 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

¿Constituye la unidad de España un bien moral sobre el que la Iglesia católica se debe pronunciar? Y esta unidad, ¿está en riesgo real? Ambos interrogantes serán, sin duda, abordados hoy y mañana por la Asamblea Plenaria Extraordinaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE), integrada en la actualidad por 66 obispos residenciales y 12 obispos auxiliares. Los prelados acudirán a una convocatoria atípica, por no decir totalmente novedosa, si se tiene en cuenta que se trata de la segunda plenaria extraordinaria de su historia y, a diferencia de la primera -celebrada en Santiago de Compostela en 1999-, se centra en diagnosticar «con detenimiento» aspectos relacionados con la «situación religiosa, cultural, social y política». La plenaria, como es obvio, ha suscitado multitud de interpretaciones y controversias previas y, como también suele ser habitual cuando se toca la «sustancia e identidad» de España, ha provocado las habituales marejadas internas en la cúpula eclesiástica. Con los dos conocidos polos religioso-identitarios que conviven, a grandes rasgos, en su seno. Visto desde un enfoque, la corriente españolista frente a los obispos nacionalistas. O, desde otro prisma, la corriente mayoritaria representada, de facto, por el ala más conservadora del Episcopado frente a la minoritaria, encabezada por el mismo presidente de la CEE y obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez. La cuestión de fondo, en las vísperas de la reunión plenaria, residía ya, no tanto en el debate de la delicada cuestión de la unidad de España, sino en si se pondría, negro sobre blanco, en una instrucción pastoral específica. De momento, según fuentes episcopales, no va a ser así. Entre otras cosas, porque generaría una anómala situación durante la visita papal. Cuestión distinta es cuando pasen unos meses, dado que la corriente más conservadora de los obispos -con los arzobispos de Toledo, Antonio Cañizares, y de Madrid, Antonio María Rouco Varela, al frente-, parece no estar por la labor de dejar este asunto al margen de los posicionamientos de la jerarquía católica. Líneas maestras La comisión permanente del Episcopado abordó durante su reunión de ayer, entre otros asuntos, las líneas maestras sobre las que discurrirán los debates en la plenaria. Las fuentes consultadas desmintieron que exista un borrador concreto sobre el controvertido asunto de la unidad de España que sirva como documento de debate previo. Ahora bien, sí se partirá de un documento de carácter más global, para abordar las líneas maestras del trabajo de la plenaria, de cuya preparación se encargó a monseñor Eugenio Romero, obispo auxiliar de Madrid, y que cuenta con la colaboración, como ponentes, del arzobispo de Pamplona, Fernando Sebastián, y del obispo de Almería, Adolfo González Montes, adscritos al denominado sector conservador. El asunto de la unidad de España, por tanto, será abordado, pero su concreción final no figurará con perfil propio en un documento pastoral específico, sino que quedará relegado con alguna posible alusión concreta en una declaración matizada y de carácter genérico, emparentada con otras reflexiones de índole sociopolítica entre las que podría figurar la próxima visita del Papa. De la misma manera, fuentes del Episcopado ya descartaron hace algunas semanas la aprobación en la plenaria de un pronunciamiento sobre el alto el fuego de ETA y el plan de paz. Otra decisión que parece evidenciar el interés de la jerarquía eclesiástica de no tensar la cuerda.