Un grupo okupa se encierra en La Pedrera tras ser desalojado

Sergi Olego BARCELONA

ESPAÑA

Protestaba por haber sido expulsado de una antigua fábrica Dos de los jóvenes permanecieron varias horas colgados de la fachada del edificio de Gaudí

04 ago 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

Unos 30 okupas se encerraron ayer durante varias horas en el edificio modernista de La Pedrera de Barcelona para protestar por el desalojo llevado a cabo en la madrugada del martes de la antigua fábrica Hamsa, que ocupaban desde hacía ocho años. Después de manifestarse por las calles del barrio de Sants, donde provocaron algunos cortes en el tráfico, las protestas se dirigieron hacia el centro de Barcelona. Hacia las once de la mañana, unos 60 okupas se dirigieron por las Ramblas y uno de los laterales del Paseo de Gracia hasta La Pedrera. Allí, la mitad del grupo, camuflado entre los visitantes, logró introducirse en el interior del edificio modernista, mientras la policía nacional cargaba contra el resto para evitar su acceso. Según Albert Martínez, portavoz de los okupas, la carga policial ocasionó contusiones a una veintena de manifestantes. Una parte de los okupas que entraron en La Pedrera se encadenaron a la terraza del segundo piso mientras otros seis activistas descendían con cuerdas, algunos por el patio interior y otros por la fachada del edificio, con una pancarta con un mensaje de protesta por el desalojo de la antigua fábrica Hamsa. A las dos del mediodía, agentes antidisturbios de la policía entraban en La Pedrera por la puerta lateral sacando del edificio, de uno en uno y en algunos casos arrastrándolos, a la treintena de okupas que estaban en el vestíbulo y en el segundo piso, varios de ellos encadenados. La acción, seguida por otro nutrido grupo de okupas que jaleaban a sus compañeros desde la calle, no concluyó hasta minutos antes de las cuatro de la tarde cuando los dos jóvenes que permanecían colgados de la fachada decidieron acabar con su protesta que respondía al desalojo a las cuatro de la pasada madrugada de los 10 okupas que aún seguían en la fábrica Hamsa. La asociación Avalot Jóvenes de la UGT de Cataluña y la Federación de Asociaciones de Vecinos y Vecinas de Barcelona (Favb) mostraron su desacuerdo con el desalojo.