PNV y PP cierran sin acuerdo su primera reunión en ocho años

Joseba García BILBAO

ESPAÑA

LUIS TEJIDO

El relevo de Arzalluz y la salida del Gobierno de los populares posibilitaron la cumbre El encuentro fue «cordial», pero sólo constató la distancia entre los dos partidos

23 jul 2004 . Actualizado a las 07:00 h.

Partido Nacionalista Vasco y Partido Popular cerraron ayer ocho años de incomunicación con una reunión en Bilbao que transcurrió en un clima «cordial», pero que sirvió además para constatar la profunda sima que supera a la primera y segunda fuerzas en el Parlamento vasco. Tras más de una hora de encuentro, el PP acusó al PNV de «no tener voluntad de diálogo» y de apostar por el acuerdo con los terroristas de ETA al mantener el denominado plan Ibarretxe. Al menos, el encuentro permitió poner fin a un largo periodo de incomunicación y restablecer la relación entre dos de los principales partidos del País Vasco. Durante más de una hora, entre las cinco y las seis y cuarto de la tarde, las delegaciones nacionalista y popular analizaron en la sede central del PNV en Bilbao -Sabin Etxea- la actualidad política vasca. Josu Jon Imaz, presidente del EBB, y Josune Ariztondo, secretaria del PNV por un lado, y Carlos Iturgaiz, presidente del PP vasco, y María San Gil, líder del partido en Guipúzcoa y candidata a lendakari, fueron los interlocutores. Tuvo que producirse el relevo de Xabier Arzalluz para que, de la mano de su sucesor, Imaz, cambie el talante y la estrategia del partido. La marcha a Europa de Mayor Oreja -a quien acompañará Iturgaiz, lo que deja en manos de San Gil el control del PP vasco- y la pérdida del Gobierno, han contribuido también a rebajar la tensión y han forzado a este partido a mostrar un carácter más dialogante. Discrepancias Tanto PNV como PP coincidieron en calificar de «cordial» el encuentro. A partir de aquí, no hubo milagros y la reunión confirmó la imposibilidad de que, hoy por hoy, ambas formaciones acerquen posturas sobre el modelo político para el País Vasco. San Gil fue especialmente crítica con el plan Ibarretxe y acusó al PNV de «no tener ninguna voluntad de moverse» con su actual estrategia, que «ampara al terrorismo y apuesta por un plan que divide a los vascos, que hace vascos de primera y segunda, que no es bueno para la convivencia en el País Vasco». María San Gil denunció la paradoja de que «quien te invita a hablar, en referencia al PNV, no tiene una voluntad de diálogo y lo que busca es la foto del falso diálogo. Nosotros no queremos engañar a la sociedad vasca, no queremos darle falsas expectativas mostrando una realidad que no existe», zanjó la candidata popular, a quien le hubiera gustado alcanzar un «punto de encuentro» con el PNV que ahora es «absolutamente inviable» por el plan Ibarretxe y por el «amparo» nacionalista a Batasuna y al entorno de ETA. Por su parte, el PNV destacó la cordialidad que rodeó a la reunión y, al margen de las discrepancias políticas, saludó el hecho de que haya sido posible restablecer la relación entre ambas formaciones.