Alega que durante el último gobierno de González hubo cuestiones más candentes y no se convocó la Diputación El PSOE le acusa de desposeer al Parlamento de sus funciones de control
02 feb 2004 . Actualizado a las 06:00 h.José María Aznar no dará explicaciones en el Congreso sobre el supuesto espionaje del CNI al líder de ERC Josep Lluis Carod Rovira y la posterior filtración a la prensa de su reunión con ETA. Los votos del PP vetaron ayer en la Mesa del Congreso esa comparecencia solicitada por la oposición. Los populares argumentan que el reglamento sólo permite reunir a la Diputación Permanente con las Cortes disueltas para declarar estados de alarma, excepción o sitio, convalidar decretos leyes y preservar los poderes de la Cámara. La vicepresidenta primera del Congreso y ex ministra de Justicia, Margarita Mariscal de Gante, aseguró además que en 1996 durante el último Gobierno socialista, había «cuestiones que estaban candentes en la opinión pública que ocupaban tantas o más páginas», -en referencia a los GAL-, que la entrevista de Carod con ETA y no se convocó a la diputación. Este argumento fue respondido por el PSOE, que esgrimió varios precedentes de reuniones de la Diputación Permanente con las Cortes disueltas, entre ellas una comparecencia de Felipe González durante la segunda legislatura y otra del ministro Alberto Oliart para informar de una detención de etarras en el primer gobierno socialista. La portavoz del PSOE en la Mesa, Amparo Rubiales, afirmó que con su planteamiento el PP «desposee» al Parlamento de sus funciones provocando una «situación absurda de no control». «Me produce repugnancia desde el punto de vista democrático -dijo Rubiales- el criterio de que el Gobierno está exento de control». El portavoz de IU, Felipe Alcaraz, instó al Gobierno a buscar fórmulas para superar el vacío reglamentario que impide que se aclaren los pormenores de la reunión de Carod con ETA. Parecidos argumentos esgrimió CiU, cuyo portavoz, Xabier Trías, reclamó a la presidenta Luisa Fernanda Rudi, que busque fórmulas para que el Gobierno comparezca. «Aunque se haya disuelto el Congreso los portavoces no nos hemos muerto ni hemos desaparecido», afirmó. Iñaki Anasagasti (PNV) tachó de «vergüenza democrática» que el Ejecutivo no dé explicaciones. Francisco Rodríguez, del BNG, aseguró que el Gobierno no quiere hablar porque «tiene mucho que ocultar». Además de la comparecencia de Aznar, la oposición había solicitado la del ministro de Defensa, Federico Trillo, y del director del CNI, Jorge Dezcallar, también rechazadas.