Cuatro ministros se «autocontrolan» ante sus compañeros de partido

La Voz

ESPAÑA

29 may 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

El espectáculo que ayer dio la oposición en el salón de plenos del Congreso ante la cara de circunstancias de varios ministros y los diputados del PP dio pie a que la habitual sesión de control al Gobierno de los miércoles en la Cámara Baja se convirtiera en una mera «sesión de autocontrol» en la que los populares se interrogaron a sí mismos. El portavoz en el Congreso, Luis de Grandes, esperó a que saliera del hemiciclo la riada de parlamentarios del PSOE, IU, PNV y Grupo Mixto ¿que atascaron los pasillos de la Cámara¿ para formular la primera pregunta de la sesión de control más peculiar y corta de la historia de España (sólo 45 minutos). De Grandes abrió el fuego con una cuestión sobre los Presupuestos al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la que aprovechó para acusar a la oposición de «abdicar de sus responsabilidades y sus obligaciones de control» recogidas en la Constitución con una actitud «propia de regímentes totalitarios socialistas». Una alocución con la que se ganó un cerrado aplauso de sus compañeros de escaño, que prestaron menos atención a la respuesta del ministro. Una vez superado el enfado inicial, y ante los asientos vacíos de la oposición, el Gobierno se encontró con un placentero pleno en el que se limitó a responder a nueve preguntas, todas ellas dedicadas al autobombo . Ministros «de apoyo» Aunque sólo los ministros de Hacienda, Educación, Sanidad y Ciencia y Tecnología tenían actividad en el Congreso, el Gobierno aconsejó una presencia más nutrida para paliar las críticas de la oposición por las ausencias del presidente Aznar y cuatro ministros. Así, los titulares de Justicia, Ángel Acebes; de Presidencia, Juan José Lucas; de Administraciones Públicas, Jesús Posada; de Trabajo, Juan Carlos Aparicio y el ministro Portavoz, Pío Cabanillas, se personaron en el banco azul sin otra misión que la de aplaudir.