Aznar recuerda al PNV que Reino Unido suspendió la «autonomía» de Irlanda

ROCÍO PATTIER Enviada especial TOLEDO.

ESPAÑA

Asegura que el partido de Arzalluz busca la «concertación total» con el mundo radical para derribar al Estado José María Aznar arremetió ayer con dureza contra «algunos» dirigentes nacionalistas, en alusión al PNV, y los acusó de «fanáticos y fundamentalistas» por intentar superar el pacto constitucional y por «no querer el fin de ETA» para sacar ventaja política. Además, contra la insistencia de que posibilite una solución similar a la irlandesa, el jefe del Ejecutivo les recordó que el Gobierno británico suspendió la autonomía y las instituciones de Irlanda hasta que el IRA no entregara las armas.

28 oct 2001 . Actualizado a las 06:00 h.

El objetivo del mitin de ayer era potenciar al PP en Castilla-La Mancha, pero la convención que el presidente del Gobierno, José María Aznar, clausuró en Toledo derivó en un repaso a la situación nacional e internacional con descalificaciones al nacionalismo, a ETA y al PSOE. El jefe del Ejecutivo, sin embargo, eludió durante su intervención de casi una hora referirse a los problemas que han salpicado a su Gobierno, como el caso Gescartera o la sanción que la Unión Europea ha impuesto recientemente a España por el fraude en las ayudas al lino. Sí habló, y sin tapujos, del terrorismo. Aznar reiteró que «no se pueden hacer distinciones entre los terroristas» con la misma contundencia con la que rechazó establecer paralelismos entre los procesos de paz en el País Vasco e Irlanda del Norte, ya que, el primero «tiene todo» y la segunda «nada». En este punto se dirigió a los nacionalistas vascos para preguntarles si, al exigirle que tome ejemplo del proceso irlandés, que ha concluido con el desarme del IRA, le están pidiendo que suspenda la «autonomía» y las «instituciones» del País Vasco hasta que ETA entregue las armas, como hizo el Gobierno británico con Irlanda. «¿Cuándo me piden que haga caso a Irlanda -continuó- me están pidiendo esto?». Buscar ventajas No dejó Aznar títere con cabeza, pero las críticas más duras se las llevaron «algunos» dirigentes del PNV y del Gobierno de Vitoria, a los que acusó de «no querer la derrota del terrorismo» con el objetivo de «buscar ventajas para resolver no sé qué conflicto político» y de llevar a Euskadi «a piñón fijo» al «precipicio». Éstas fueron las conclusiones a las que el presidente ha llegado tras escuchar las declaraciones de los nacionalistas asegurando que todos los terrorismos no son iguales y proponiendo, como hizo Xabier Arzalluz, una consulta a los ciudadanos para que sean ellos los que digan si quieren que ETA siga existiendo. La oferta del lehendakari, Juan José Ibarrexte, al Gobierno central para llegar a un pacto de Estado con el fin de avanzar en el proceso de autodeterminación obedece, en opinión del jefe del Ejecutivo, a la «ceguera», el «fundamentalismo» y el «fanatismo» de quienes justifican permanentemente a los terroristas. Por ello, alertó de que el PNV buscará «en breve» la «concertación total» con el mundo radical para «echar abajo el edificio del Estado». Pero su estrategia, según advirtió Aznar, no saldrá adelante. «Nadie -sentenció- va a quebrar la España constitucional», aunque dejó claro que «lo van a intentar». Sobre ETA, dijo que era el «último reducto, el más fanático y el más estúpido» de Europa.