El desorbitado precio de las entradas para la Final de la NBA entre los Celtics y los Mavericks
POLIDEPORTIVO
El precio de las entradas para la Final de la NBA entre los Celtics y los Mavericks irá aumentando según avance la serie
06 jun 2024 . Actualizado a las 17:57 h.Los Boston Celtics y los Dallas Mavericks descorchan este jueves la Final de la NBA de 2024, que enfrentan a la legendaria dinastía de verde con el sueño de un Luka Doncic que aspira a su primer anillo. Tal expectación ha generado este duelo que las entradas para el primer partido han alcanzado un precio desorbitado. Sin embargo serán las más asequibles de la Final de la NBA. Según vaya avanzando la serie, el precio de las entradas irá creciendo.
La entrada más barata para el primer partido de la Final de la NBA entre los Boston Celtics y los Dallas Mavericks será de 793 dólares según la plataforma TickPick. Para el segundo enfrentamiento entre los dos equipos, que también se disputará en Boston, el precio de la entrada más asequible ascenderá a los 853 dólares.
En Dallas, por su parte, donde tendrá lugar el tercer enfrentamiento de la Final de la NBA entre los Boston Celtics y los Dallas Mavericks, el precio de la entrada más barata será de 971 dólares; ascendiendo hasta los 1.179 dólares para el cuarto.
Si la Final de la NBA entre los Boston Celtics y los Dallas Mavericks llegara al quinto partido, éste se jugaría nuevamente en Boston y la entrada más asequible sería entonces de 1.230 dólares.
Curiosamente, el más caro de todos estos partidos no sería el séptimo y decisivo encuentro, si no el sexto si se jugase. El sexto enfrentamiento de la serie tendría lugar en Dallas y la entrada más barata para este choque sería de 1.827 dólares. El séptimo, por su parte, que se jugaría en Boston, contaría con la entrada más barata a un precio de 1.737 dólares.
La Final de la NBA entre los Celtics y los Mavericks
El TD Garden de Boston acogerá este jueves a partir de las 20:30 horas (00:30 GMT del viernes) el primer partido de la Final de la NBA. El segundo encuentro se disputará en el mismo recinto el domingo antes de que la serie viaje a tierras texanas.
Con el factor cancha a favor y tras ser claramente el mejor equipo durante la temporada regular (64-18), los Boston Celtics parten en principio como favoritos y podrían conquistar su anillo número 18, lo que les permitiría desempatar con sus eternos rivales: Los Angeles Lakers (17).
Boston Celtics no gana el título desde 2008, pero ha jugado seis de las últimas ocho finales del Este. Solo en una de ellas llegó a la Final de la NBA: las de 2022, en las que hincó la rodilla ante los Golden State Warriors de Stephen Curry.
Jayson Tatum y Jaylen Brown son los referentes de un equipo que cuenta con el mejor quinteto titular de la liga incluyendo a Jrue Holiday, Derrick White y Kristaps Porzingis. Precisamente el pívot letón es uno de los nombres en mayúsculas de este primer partido, ya que Kristaps Porzingis no juega desde finales de abril por una lesión en una pantorrilla, pero todo apunta a que estará disponible para el estreno de la Final de la NBA y para su reencuentro con unos Dallas Mavericks de los que salió en 2022 por la puerta de atrás.
Los Boston Celtics se han paseado este curso en un Este repleto de conjuntos decepcionantes o lastrados por las lesiones.
Así, los de Joe Mazzulla se garantizaron el primer puesto de la conferencia a finales de marzo y solo han perdido dos partidos en estos playoff tras eliminar por 4-1 a los Miami Heat y los Cleveland Cavaliers y barrer por 4-0 a los Indiana Pacers.
Muy descansados pero quizá sin retos realmente exigentes en los dos últimos meses, los Boston Celtics también ofrecen dudas respecto a una segunda unidad en la que el dominicano Al Horford, con 38 años recién cumplidos, sigue siendo una pieza fundamental.
Los Mavericks se encomiendan a Doncic ante los Celtic
Máximo anotador de la NBA esta temporada y tercero en la votación para el MVP, Luka Doncic llega con 25 años a sus primera Final de la NBA al frente de unos Dallas Mavericks en constante e impactante crecimiento desde febrero.
Fue entonces cuando los texanos incorporaron a P.J. Washington y Daniel Gafford, claves en la transformación de un equipo que, casi de la noche a la mañana, se convirtió en un rival temible, rocoso y muy duro físicamente.
Prueba de ello es el muy peligroso camino que han sorteado en el playoff unos Dallas Mavericks que no han tenido el factor cancha a su favor en ninguna de las tres series tras ser quintos del Oeste en la fase regular (50-32).
No les importó demasiado ya que eliminaron a Los Angeles Clippers por 4-2, repitieron resultado contra los Oklahoma City Thunder y sometieron por 4-1 a unos Minnesota Timberwolves que habían destronado a los Denver Nuggets campeones del año pasado.
A pesar de estar claramente mermado por una lesión de rodilla en las últimas semanas, Luka Doncic ha brillado con luz propia en este playoff y aspira a tomar el testigo de Dirk Nowitzki, que en 2011 le dio el único anillo de su historia a la franquicia de Texas.
En ese título fue imprescindible como jugador Jason Kidd, quien ahora dirige a los Dallas Mavericks desde el banquillo.
Luka Doncic cuenta con un escudero de lujo en Kyrie Irving, que ha recuperado su mejor nivel y que ahora afronta un reto formidable regresando a Boston, donde es persona non grata tras su muy polémico paso por los Celtics (2017-2019).
El fabuloso talento anotador de Doncic e Irving es la mayor amenaza para los de verde, pero Dallas ha sabido construir un bloque muy compacto en el que también destaca la aportación interior del pívot novato Dereck Lively