Elena Muñoz: «No defiende más Vigo el que más grita y da puñetazos en la mesa»

Elena Muñoz (Madrid, 1971) confiesa que, en la frutería, mientras le hacen la cuenta, ella va sumando en paralelo. «Deformación profesional», explica la exconselleira de Facenda y candidata popular en Vigo.

-Los de Hacienda parece que son siempre los malos.

-Hay que encajar gastos e ingresos. Y a veces hay que ser tajante. Nadie entiende un «no» porque sí. Yo, cuando digo «no», lo argumento. Hay que dialogar. Me preocupan los que prefieren el monólogo.

-¿Por qué cree que no quiere debatir Abel Caballero?

-Puede ser que no tenga un proyecto o no pueda hacer un balance. Hace cuatro años quería debatir con todos. Ahora dice que no. Cuando no tienes nada que esconder, no tienes problema en debatir. Yo tengo la conciencia muy tranquila.

-¿Cuál sería su primera decisión como alcaldesa?

-Reunirme con todos. Con representantes del Gobierno central, de la Xunta, del Puerto.. Para abordar las cuestiones importantes para Vigo. Y trabajaría en un plan de empleo. No se pueden dedicar 160 millones a aceras y macetas, y solo 5 al empleo. Es una balanza destructiva.

-Feijoo dijo que, en Vigo, usted es la hormiga frente a la cigarra.

-Compara el trabajo desde la humildad con un objetivo común frente al que critica mucho y no hace nada. Yo estoy dispuesta a defender Vigo por encima de todo. Pero no defiende más Vigo el que más grita y da puñetazos en la mesa. Aquí últimamente se le han puesto trabas a todos los proyectos importantes.

-Hace bici y natación. ¿Hay que ser una «Irongirl» para presentarse en Vigo?

-Lo que hace falta para presentarse en Vigo es ilusión. Es la mejor vitamina. La ciudad necesita un cambio. Pero sí que hago bicicleta. Voy por el sendero que va pegado a Lagares y por el parque de Castrelos. Ahora no tengo tiempo para el deporte. Lo hago llegando a todos los rincones de Vigo. Me gusta ver fútbol y tenis. Soy del Celta y voy a Balaídos. Y me encantaba ver a Boris Becker en Wimbledon. Me gusta el tenis por el esfuerzo. Los tenistas no saben cuándo acabará el partido.

-Los clubes de fútbol tienen sus más y sus menos con Hacienda.

-Cada uno tiene que estar en su sitio. Debemos pagar los que nos corresponde para tener servicios públicos.

-¿Habla con los conselleiros?

-Con todos, pero ahora yo les hablo de Vigo, del hospital, de la estación intermodal... Aprendí cómo funciona la Xunta en años difíciles. Eso es un privilegio.

-¿Qué le parece que proliferen los carteles de «Alcaldía» en Vigo?

-Las cosas que pasan en esta ciudad no pasan en otros sitios de Galicia. Eso es egolatría. El Concello no es una sola persona, es de todos y para todos.

-¿Y la rotonda con barco?

-Es un símbolo de la prepotencia de un gobierno decide en contra del pleno. Es un insulto hacia los que lo pasan mal en Vigo. Se les dice que no hay dinero y se despilfarra trasladando un barco a una rotonda. Yo en ese asunto buscaré el consenso. Pero no despilfarraré más dinero.

-Le encanta el cine. ¿La política es un drama? ¿Una comedia?

-Es apasionante, como una película de intriga y de aventuras. A mí me gustan las de suspense, las comedias románticas... Ahora me toca ver películas infantiles con mis hijas de 11 y 13 años, y las disfruto. Voy con toda la parafernalia: palomitas, Coca-Cola...

-¿Es más duro compatibilizar la política y los hijos siendo mujer?

-Tenemos mucho camino por andar. Las administraciones deben hacer más. ¿Qué haríamos sin los abuelos? Yo, sin mis padres, no sé cómo hubiera hecho. Nunca se lo agradeceré lo suficiente.

-¿Cómo les explica lo de gestionar bien a las niñas?

-Hay que inculcar esos valores desde el principio. No tienen pagas todavía. En el futuro sí que lo haré para que sepan administrar. Pero son muy listas. A veces son más listas que su madre. Los hijos te enseñan cada día.

-Tiene imagen de formalita.

-Siempre he sido trabajadora y ordenada. Cuando hay que trabajar, a trabajar. Pero cuando hay que disfrutar, a disfrutar. Hay que sacarle el máximo a la vida en todos los momentos.

Más personal

-Una ciudad que no sea la suya.

-Dos. Madrid y Oviedo.

-La asignatura que se le atascó.

-Física, en COU. No recuerdo haber estudiado tanto. Ni en la carrera. 

-¿Tiene mascotas?

-Tengo una perra y una gata. 

-¿Sus últimas vacaciones?

-Nos escapamos a ver a la familia a Londres. Así practican inglés las niñas. 

-¿Qué hace un domingo?

-Desayunar con mis hijas. Dar un paseo con mi perra. Ir con mis hijas al cine... Jugamos a la Wii, a juegos de mesa... El tiempo libre intento dedicárselo a ellas.

-En pocas palabras: Caballero.

-Prepotencia.

-Feijoo.

-Honestidad.

-Montoro.

-Hace un trabajo ingrato.

Su dibujo

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