Los resultados en Ourense: Baltar mantiene su porcentaje de voto, pero pierde un escaño

Xosé Manoel Rodríguez OURENSE / LA VOZ

ELECCIONES 2020

la voz

Los populares bajaron a pesar del apoyo del independiente Pérez Jácome

13 jul 2020 . Actualizado a las 02:39 h.

Uno de los protagonistas, en teoría involuntario, del 12J fue Gonzalo Pérez Jácome. El alcalde de Ourense y socio del PP anunció antes de la convocatoria de las autonómicas —del 5 de abril— que no presentaría candidatura para no perjudicar a los que le habían beneficiado a él: el PP y Alberto Núñez Feijoo. La afirmación no era un farol: en el 2016 Democracia Ourensana se presentó a las autonómicas por Ourense y obtuvo 7.723 votos —un 4,39 % de las papeletas depositadas en la urna—.

El apoyo explícito de Jácome no tuvo los beneficios que él deseaba, más bien al contrario: el PP perdió representación con respecto al 2016 y sus 9 diputados de entonces se vieron reducidos a 8. Los 82.514 votos del PP mantienen el feudo de Baltar como uno de los caladeros de los populares, aunque menos de lo esperado por los conservadores.

Pérdida compensada

Los 93.487 votos obtenidos por los populares en el año 2016 se vieron reducidos en casi 11.000 papeletas menos, una circunstancia que no tiene repercusión en términos porcentuales. En el 2016 votaron 177.468 personas —el 48,70 %— y en esta ocasión lo hicieron 154.633 electores —lo que incrementó la participación hasta el 60,79 %—. Con el nuevo escenario, aún perdiendo apoyos y dejándose un diputado por el camino, el PP se mantiene con un respaldo del 53,13 % en la provincia de Ourense.

Los grandes protagonistas de la jornada del 12J fueron Noa Presas y sus compañeros del BNG. Los nacionalistas acusaron el golpe de las mareas en el 2016 y la inexperta diputada consiguió en estos cuatro años posicionar los temas ourensanos en el Parlamento de Galicia. Ahora el Bloque pasa de 1 a 3 diputados en el Hórreo y se sitúa como la segunda fuerza más votada en la provincia, con más de 20.000 papeletas que hace cuatro años —30.978 votos— y con una subida porcentual de casi 14 puntos.

El PSOE aprovecha el nuevo escenario político —con la pérdida de un diputado del PP y la desaparición de las mareas— para cerrar las autonómicas del 2020 con la suma de un nuevo diputado, pasando de dos a tres escaños en el Parlamento de Galicia. Un incremento que llega con sabor agridulce, ya que los socialistas no consiguen un apoyo destacado —apenas un 2,07 % más de papeletas— y se quedan relegados a ser la tercera fuerza política de la provincia ourensana.

Adiós a las mareas

La irrupción de En Marea hace cuatro años rompió el tablero de la circunscripción, situándose con dos diputados en igualdad de condiciones con el PSOE y relegando al BNG a la condición de cuarta fuerza política.

La división del movimiento y la presencia de dos opciones con referencia a la antigua formación —Galicia en Común y Marea Galeguista— solo ha conseguido la desaparición del mapa político ourensano. Las primeras encuestas daban un diputado a los primeros, David Bruzos, pero finalmente no se confirmó está circunstancia —Galicia en Común obtuvo 3.332 papeletas, el 2,15 %— y serán PP, BNG y PSOE los representados.

La crisis del paritorio de Verín se lleva cerca del 12 % de los votos conservadores

La crisis del paritorio de Verín ha estado presente en la campaña —a Feijoo lo despidieron con gritos y cacerolada en el mitin de la capital del Támega— y ha pasado factura al PP. Los populares se mantienen como la fuerza más votada pero pasan de los 3.576 a los 2.463 votos del 12J, es decir, un 11,59 % menos. El gran beneficiado es el BNG, que registra una subida del 18,68 % y sus 1.926 votos le convierten en la segunda fuerza. El PSOE sufre un pequeño incremento de 72 votos (el 2,88 %).