Y a partir del lunes, reconstrucción

Carlos Punzón
carlos punzón VIGO / LA VOZ

ELECCIONES 2020

Pabellón polideportivo de Burela acondicionado para las votaciones.
Pabellón polideportivo de Burela acondicionado para las votaciones. Xaime Ramallal

Gane quien gane tendrá que afrontar como eje clave de su gestión la reactivación de la economía. Los expertos piden eficacia, apuestas que arrastren y más peso rural

11 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La campaña de las elecciones gallegas ha registrado un consenso generalizado: Galicia tiene que afrontar su reconstrucción para salir de la crisis abierta por el covid-19. Alberto Núñez Feijoo advirtió en su primer acto político que está por llegar «una verdadera pandemia económica». Gonzalo Caballero reclamó «políticas de izquierda para salir de una crisis de esta profundidad». Ana Pontón prometió crear una secretaría para la Reconstrucción, «para levantar este país». Y Gómez-Reino declaró su apuesta por el diálogo social para salir del bache.

Los mensajes sobre esa reconstrucción se hicieron expresos en la primera parte de la campaña, pero la pugna política, los mensajes centrados en tratar de movilizar al electorado y los rebrotes del coronavirus fueron diluyendo la concreción sobre qué fórmulas económicas poner en marcha para afrontar esta crisis.

«Ha sido una campaña generalista, con mensajes básicos y carente de propuestas concretas, sin compromisos claros sobre qué van a hacer con nuestros impuestos», radiografía Santiago Lago, director del Foro Económico de Galicia. Para una correcta utilización de los fondos públicos, especialmente en tiempos de crisis, el economista considera que es necesario abordar una reforma de la Administración para que su ritmo y vericuetos no frenen las inversiones, a la vez que reclama que se haga una exigente evaluación del gasto público.

Lago Peñas defiende la apuesta por proyectos tractores que tiren desde sectores estratégicos del resto de la economía; puesta en marcha de experiencias piloto para no errar en las inversiones y apuestas; mayor imbricación entre investigación y empresa y, de manera especial, y un vuelco decidido y prioritario hacia el rural. «Es nuestro tapado y el ámbito capaz de hacer crecer varios puntos el PIB de Galicia», afirma. «La diferenciación es básica, es una de las lecciones que nos ha dejado esta crisis», añade.

Y lastres como el demográfico solo tienen solución, a su juicio, con crecimiento económico. «Si la economía crece, lo demás viene rodado, incluso la captación de nuevos residentes», concluye.

Luis Caramés, catedrático de Economía Aplicada de la Universidade de Santiago, traza la recuperación sobre tres ejes: el relanzamiento de la economía, una agenda social reforzada, y una mayor sensibilidad medioambiental.

Reducir el uso de materiales para pisar con más decisión el de la reutilización es una de las recetas concretas que señala Caramés para el nuevo escenario poscovid. Profundizar en un plan de nuevas tecnologías y teletrabajo, «como una inversión estratégica para la protección y seguridad laboral» y poder mantener la actividad en caso de nuevas pandemias son, para Caramés, necesidades que hay que atender.

Pone el acento el economista en tratar de acabar de manera decidida con localismos que frenan el desarrollo y potencialidad de la comunidad. Apunta como ejemplo la política aeroportuaria, para la que demanda una definición de «auténticos» objetivos estratégicos en un momento en el que además la demanda de viajes es débil. «Al país se le sirve en su conjunto, sin que los localismos exacerbados consigan algo más que consumir recursos, cuya financiación pagarán las generaciones futuras», mantiene.

Igualmente estratégico entiende Caramés que debe de ser el compromiso que el Gobierno debe de alcanzar con las universidades para optimizar sus recursos y estatus científico. «Actuar con valentía y sentido de país para reconocer errores, suprimir titulaciones duplicadas, que atienden una demanda mal orientada y con deficiente acomodo en el mercado laboral», reclama.