Pablo Casado se envalentona e intenta colocar a Álvarez de Toledo como portavoz en el Congreso

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado MADRID | LA VOZ

ELECCIONES 2020

Imagen de un acto de campaña en las pasadas generales
Imagen de un acto de campaña en las pasadas generales Toni Albir | EFE

Los barones, encabezados por Feijoo y Moreno Bonilla, advierten que se trata de una opción que supondrá volver a escorar al partido hacia la derecha

29 may 2019 . Actualizado a las 18:52 h.

Pulso dentro del PP por la elección de la portavocía del Congreso. Pablo Casado ha vuelto a desempolvar la opción de Cayetana Álvarez de Toledo. La cabeza de lista por Barcelona, que fue uno de los primeros nombres en salir a la luz, pareció perder todas sus opciones una vez que, golpeado por la debacle de las generales, el presidente del partido se comprometió a buscar el centro político y a moderar su discurso.

Sin embargo, la posibilidad de formar gobierno en la Comunidad y en el Ayuntamiento de Madrid, listas lideradas por dos de sus apuestas personales, le han dado aire a Casado, y el pasado lunes, tan solo unas horas después de ver cómo su liderazgo se tambaleaba, pareció regresar al punto de partida. ¿Qué significa esto? A grandes rasgos: olvidarse del centro político, está prohibido referirse a Vox como un partido de extrema derecha y Cayetana Álvarez de Toledo como portavoz de la Cámara Baja.

Y en estos tres frentes es en donde están las grandes discrepancias entre la dirección del PP y un importante grupo de barones del partido, que apuestan por pelear el centro político (el único sitio desde el que se ganan las elecciones), por marcar mucho las distancias con Vox y por una portavocía de formas más suaves en el hemiciclo. Este miércoles concluye la prórroga concedida por la Mesa del Congreso para designar a los portavoces parlamentarios, pero como en realidad es un cargo que pueda modificarse a lo largo de la legislatura, y hasta que se desbloquee la investidura no habrá plenos, la ejecutiva nacional ha decidido designar de forma momentánea a Bermúdez de Castro como sustituto de Dolors Montserrat. Esto solo responde a que Casado necesita más tiempo para decidirse si se decanta por atender a las presiones de su círculo más íntimo y de determinados grupos mediáticos de la capital, o si atiende a los Feijoo, Mañueco, Moreno Bonilla, Bonig, Alonso y compañía. El futuro del partido está en juego.

Lo único que Génova tiene claro es que la persona que asuma la portavocía tiene que ser una mujer. Con Casado en una posición de extrema debilidad al frente del partido, justo tras la catástrofe del 28A, el presidente del partido llegó a ofrecerle a Ana Pastor convertirse en el altavoz del grupo parlamentario, bendiciendo la tesis de los barones territoriales. Pero ahora, envalentonado con las plazas de Sol y Cibeles (todavía falta que se concreten en los pactos poselectorales), ha vuelto a ganar enteros la opción de Álvarez de Toledo, una persona que representa al ala más a la derecha del partido, una formación que abandonó hace un par de años esgrimiendo su profundo desacuerdo con la postura de Rajoy en Cataluña, que calificó de permisiva con el independentismo. Pero Casado ganó las primarias y le ofreció a Álvarez de Toledo convertirse en su mascarón de proa en Cataluña. El PP solo sacó un escaño en toda la comunidad autónoma, precisamente, el encarnado por esta pupila destacada de José María Aznar

Los otros nombres que continúan con opciones de convertirse en portavoces del grupo popular en el Congreso son la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, que realizó un aseado trabajo al frente de las campañas de estas municipales y autonómicas; Belén Hoyo, que sería una cara fresca que aportaría el partido, aunque apenas cuenta con experiencia en la Cámara Baja, o incluso la gallega Marta González, vicesecretaria de Comunicación del PP.

Levy admite que decisiones «importantes» como la del portavoz del PP en el Congreso deben tener «consenso» 

La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP y concejala electa por Madrid, Andrea Levy, ha asegurado este miércoles que decisiones «importantes» como la del portavoz del Grupo Popular en el Congreso deben tener «consenso» dentro del partido. Así se ha pronunciado en una entrevista en Antena 3, recogida por Europa Press, al ser preguntada cómo valora que la diputada del PP por Barcelona Cayetana Álvarez de Toledo pueda ser la portavoz en la Cámara Baja, en un momento en que hay barones territoriales del partido y cargos de la formación que prefieren a una persona de perfil más moderado.

El presidente del PP, Pablo Casado, ha aplazado la decisión de los portavoces en el Congreso y el Senado y no desvelará su decisión hasta el mes de junio, en una reunión de la Junta Directiva Nacional, máximo órgano del partido entre congresos. Por ahora, ejercerán esos cargos de forma interina José Antonio Bermúdez de Castro en la Cámara Baja e Ignacio Cosidó en la Cámara Alta.

«Decisiones que son importantes como los nombramientos de cargo deben tener consenso», ha manifestado Levy, que ha admitido que en el PP hay muchas voces y personas que «teniendo objetivos comunes y compartiendo un mismo proyecto tienen sensibilidades diferentes». Según la vicesecretaria popular, eso es lo que ha hecho «siempre tradicionalmente grande» al PP, que es un partido no solo con vocación de ganar elecciones sino de ser «alternativa de Gobierno».

Por eso, ha dicho que es «bueno» que haya conversaciones en las que se den «distintos puntos de vista», porque «las cosas no se ven igual» en un municipio pequeño que desde una gran capital, en alusión al debate que mantuvo Pablo Casado con los barones del PP sobre el resultado electoral durante un debate celebrado el lunes.

A partir de ahí, la responsable de Estudios y Programas del PP ha indicado que «cualquiera que sea portavoz lo hará estupendamente». Aparte de Álvarez de Toledo, en las quinielas aparecen nombres como Cuca Gamarra, Isabel García Tejerina o Belén Hoyo, entre otros. Dicho esto, Levy se ha mostrado «absolutamente convencida» de que el liderazgo de la oposición en el Congreso y el Senado lo ejercerá el PP en esta legislatura porque son el «grupo mayoritario» después del PSOE «aunque a otros les guste ponerse medallas y etiquetas».

En este sentido, la concejala popular ha afirmado que el que debe «preocuparse» es Pedro Sánchez, al que el PP va a hacer un «marcaje muy directo» porque es su «rival» político. «Ahora lo importante es estar a la altura de los resultados del 26 de mayo», ha afirmado, para rechazar los «cambalaches de unos territorios por otros» en los pactos postelectorales. Según ha subrayado, el PP se va a tomar «muy en serio» esta negociación.