El nacionalismo comienza a mostrar sus cartas: no dará gratis su apoyo al PSOE para que gobierne

Ana Balseiro
ana balseiro MADRID / LA VOZ

ELECCIONES 2020

Pedro Sánchez y su equipo, en la reunión con los portavoces parlamentarios de ERC, Gabriel Rufián y Joan Tardá, en el marco de la ronda de contactos en febrero del 2016 antes de someterse a la investidura
Pedro Sánchez y su equipo, en la reunión con los portavoces parlamentarios de ERC, Gabriel Rufián y Joan Tardá, en el marco de la ronda de contactos en febrero del 2016 antes de someterse a la investidura J.J. Guillén | Efe

El PNV aspira a más autogobierno para el País Vasco y a un nuevo modelo de Estado y ERC pide abrir un «diálogo» sobre la independencia de Cataluña

05 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Con la mayor presencia en el hemiciclo que se recuerda en la democracia (37 diputados, más del 10 % de los escaños, entre Esquerra Republicana, Junts per Catalunya, PNV, EH Bildu, Coalición Canaria y Compromís), los nacionalistas comienzan a mostrar sus cartas de cara a la investidura de Pedro Sánchez. De forma más o menos amable -para crispar siempre habrá tiempo-, algunas formaciones, como PNV, ERC o EH Bildu, ya avanzaron este sábado que su apoyo al PSOE no será gratis.

Más autogobierno y un nuevo modelo de Estado serán las exigencias principales de los nacionalistas vascos. Así lo aseguró la parlamentaria y diputada electa del PNV por Vizcaya Josune Gorospe. En declaraciones a Radio Euskadi, explicó que quien les llame «sabe perfectamente que sobre la mesa va a estar la agenda vasca, que está reflejada en el programa electoral», y recordó que su formación va «a Madrid o a Bruselas para ocuparse de los intereses de los vascos y mejorar su bienestar y defender el autogobierno».

La formación, que logró seis diputados en los comicios del pasado domingo 28 de abril, dice estar «dispuesta al diálogo» con el PSOE y, «si se puede, pactar», pero atendiendo a la necesidad de «avanzar hacia un nuevo modelo de Estado». Gorospe advirtió de que no es a su partido a quien «le toca dar el paso», pero que «en el momento en el que Pedro Sánchez llame al PNV, que nadie dude de que siempre va a estar dispuesto a hablar».

También recordó la «respuesta clara, la voluntad distinta», vista en los comicios del 28A tanto en el País Vasco como en Cataluña, «que han votado distinto», nacionalista. Así, defendió como imperativo que desde Madrid se les dé respuesta a esas otras «realidades nacionales» y apostó, como opción de Gobierno, «por la que se comprometa a avanzar en la agenda vasca, en el respeto del autogobierno, en avanzar hacia más autogobierno y en ir reconociendo la plurinacionalidad del Estado y dar pasos en el nuevo modelo».

Sin líneas rojas

Por su parte, durante un acto celebrado en Valencia por la libertad de los líderes independentistas presos, el exdiputado de ERC Joan Tardà, también confirmó la disposición de su partido a negociar el apoyo a un PSOE del que, sin embargo, dijo, no sabía con cuál de sus caras se encontrarían, «la del 155 y el a por ellos, que hasta pedía la ilegalización de los partidos independentistas», o un PSOE que quiera, «como mínimo, sentarse a hablar». Aseguró que ERC no pondrá «líneas rojas», pero que tampoco dará «gratis» la investidura a Sánchez, y añadió que, incluso si el PSOE ignorara a Esquerra, no modificaría la estrategia de los independentistas para conseguir un marco de diálogo para el proceso catalán, «como hicieron los republicanos irlandeses».

En el mismo acto, Jon Iñarritu, diputado electo de EH Bildu en el Congreso, también aseguró que se sentarían a hablar con el PSOE si este intenta buscar «soluciones políticas» a la crisis secesionista de Cataluña.