PNV y PSE reeditan su pacto para gobernar las principales instituciones vascas

Adolfo Lorente BILBAO / COLPISA

ELECCIONES 28M

Andoni Ortuzar, presidente del PNV
Andoni Ortuzar, presidente del PNV H.Bilbao | EUROPA PRESS

La socialista Maider Etxebarria será la alcaldesa de Vitoria y la nacionalista Eider Mendoza la diputada general de Guipúzcoa gracias al apoyo del PP

02 jun 2023 . Actualizado a las 12:02 h.

Tenía que ser rápido y así ha sido. Cinco días después del inesperado anuncio del presidente del Gobierno de convocar elecciones generales anticipadas el 23 de julio ha obligado al PNV y el PSE a maniobrar sobre la marcha y acelerar el acuerdo para garantizar la gobernabilidad de las instituciones vascas tras las elecciones municipales y forales del 28M. De momento, no se conoce la letra pequeña (se sigue trabajando en el acuerdo programático que tendrá una veintena de páginas). Lo esencial es el mensaje: «garantizar la gobernabilidad y la estabilidad de las instituciones desde el respeto a la pluralidad vasca».

El trazo grueso es simple: que uno apoye al otro en aquel lugar donde sea la lista más votada entre los dos y no tengan mayoría absoluta por sí solos, más de una treintena de ayuntamientos al margen de las diputaciones. Así, la Alcaldía de Vitoria será para la socialista Maider Etxebarria y la Diputación de Guipúzcoa, para la nacionalista Eider Mendoza. En ambos casos, EH Bildu será la damnificada y el apoyo del PP, que ambos partidos dan por seguro, será imprescindible para que así sea. Otra cosa es la gobernabilidad, ya que los populares han advertido de que no lo pondrán nada fácil después del portazo que han sufrido a su propuesta de formar parte de los ejecutivos donde su voto sea necesario.

Lo que se ha anunciado es el comunicado conjunto de apenas seis párrafos se sintetiza así: «Consideramos necesario reeditar, allí donde sea posible, este acuerdo y que, más allá de garantizar la gobernabilidad, lo haga sobre unas bases claras que nos permitan hacer frente a desafíos como la protección de los servicios públicos, la lucha contra las desigualdades, el impulso al progreso y la justicia social y responder a los grandes retos que tiene la sociedad vasca hoy: el climático, el demográfico y la adaptación a una nueva economía productiva con nuevos empleos y derechos laborales».

El pacto que hoy se ha anunciado es la reedición del suscrito en el 2015, primero, y en el 2019, después. Ocho años de pactos que se extenderán al menos otros cuatro, hasta 2027. El balance de esta colaboración, aseguran en el comunicado, es «altamente satisfactorio».