Varela propone ubicar las piscinas saladas en un Ramal verde y despejado de naves, que se integrará en el paseo marítimo

Serxio González Souto
serxio gonzález VILAGARCÍA / LA VOZ

ELECCIONES 28M

CEDIDA

El PSOE se compromete a convertir el muelle y la parcela de su base en un espacio de uso público sin tocar apenas el aparcamiento

05 may 2023 . Actualizado a las 20:32 h.

El 26 de enero del año pasado, Alberto Varela, en su condición de alcalde de Vilagarcía, y José Manuel Cores Tourís, como presidente de la Autoridad Portuaria, cerraban ante notario la compra de la parcela de 6.829 metros cuadrados que constituye la base del muelle de O Ramal. Al integrar en el patrimonio municipal este suelo edificable, el gobierno socialista cumplía dos de los objetivos que Varela y su equipo se habían fijado al acceder a Ravella en el 2015: frenar la construcción del hotel del que se llevaba décadas hablando y orientar esta zona hacia un uso libre por parte de la ciudadanía. Lo que en el argot local se ha dado en llamar «abrir Vilagarcía al mar». El momento de hacerlo realidad parece haber llegado. Al menos, de acuerdo con el compromiso que Varela, candidato del PSOE a la reelección, asumió ayer junto a una parte importante de su lista.

El regidor mostró una recreación de lo que, a grandes rasgos, será el nuevo Ramal. A los 6.829 metros cuadrados de esta parcela se unirán los 11.500 metros que el Puerto cederá al Concello en el propio muelle, en régimen de concesión. Aproximadamente, la mitad de su superficie. «As naves serán demolidas para permitir crear unha zona de desfrute para os vilagarciáns», subrayó Varela Paz, quien explicó que en un espacio intermedio donde hoy solo crece maleza, a continuación de las estructuras que serán derribadas, se ubicarán las célebres piscinas de agua salada que, en principio, iban a ser excavadas en la playa de A Concha. «Terán un destino de ocio, non deportivo, pensando nos máis pequenos e nas persoas maiores», indicó el candidato socialista.

El resto del muelle que quedará en manos municipales será ordenado para albergar la continuación del paseo marítimo y un espacio humanizado, dotado de amplias zonas verdes. La parte final de la estructura permanecerá bajo gestión portuaria. Allí se abrirá una pequeña terminal de cruceros y las instalaciones que el Puerto les ha concedido a los parquistas de Carril.

MONICA IRAGO

No menos importante es lo que el PSOE propone llevar a cabo en la parcela de titularidad municipal. «Servirá —explicó el regidor— como unha conexión verde entre o parque Miguel Hernández e a praia, permitindo dotar dun quilómetro máis ao paseo marítimo», una vez se interne en la estructura del muelle. Ese corredor verde, puntualizó el alcalde, se desarrollará con una afección mínima a las plazas de aparcamiento libre y gratuito que hoy mantiene esta finca. «A idea é que se conserven todas as prazas que sexa posible, de acordo co proxecto que se deseñe», reiteró Varela mientras señalaba la imagen que muestra el futuro aspecto de este entorno.

Los socialistas proponen sacar a concesión en ese último tramo del paseo un pequeño negocio vinculado a la hostelería, que a su vez asuma la limpieza y mantenimiento de los baños públicos, tal y como sucede en el parque del balneario. La intervención facilitará, por último, que el callejón lateral de Villa Aurora, hoy ciego, se convierta en un acceso peatonal a Rosalía de Castro.

En definitiva, la operación permite a la ciudadanía «ganar doce mil metros cadrados nun espazo privilexiado», concluyó Varela, «satisfeito de oito anos de poder dicir que nos presentamos coas ideas moi claras». En cuanto a la regeneración de la playa, el alcalde señaló que Tragsa está ultimando el proyecto definitivo.