¿Por qué Apple eligió a este profesor de opositores de Santiago entre los mejores del mundo?

Esta semana Antonio Reyes Sánchez recibió de madrugada un correo electrónico inesperado. En él le informaban de que Apple lo había elegido entre los mejores docentes del mundo, tras presentar —por primera vez y sin grandes expectativas— su candidatura a los premios bianuales Apple Distinguished Educators (ADE), que reconocen a educadores que marcan la diferencia utilizando las TIC para mejorar el aprendizaje.

«Todo arrancó hace unos 8 o 10 años. Empecé a hacer lo mismo que hacía, pero apoyándome en las nuevas tecnologías, y vi que disparaban la motivación de los estudiantes, en este caso opositores», cuenta el psicopedagogo nacido en Santiago y vecino de Cacheiras (en Teo), quien actualmente dirige el centro de FP de Premir. Comenzó a descubrir ese efecto dando clases en la academia de Pontepedriña, a la que se incorporó en el 2004, relata: «Impartía legislación educativa y, cuando hacía un examen tipo test al final de una sesión sobre lo que acabábamos de ver ese día, se convertía en la peor tortura que podía hacer a los estudiantes. Un buen día se me ocurrió hacerlo usando una app, Kahoot. Yo ponía las preguntas en la pantalla digital y ellos iban contestándolas desde sus móviles. Además, se veía quien había sido el más rápido, quienes habían acertado... Y, una actividad que antes era un auténtico suplicio, se convirtió algo dinámico y súper motivador». Comprendió en ese momento el compostelano de 44 años que «más vale estar del lado de las tecnologías y no de espaldas a ellas».

A través de un blog educativo, Gigas de Tiza, empezó a conectar también con otros maestros y pasó a transformarse en un canal de YouTube seguido por más de 37.000 docentes (el 17 % de ellos de España, un 20 % de México y cerca del 60 % de países de Latinoamérica). Así, Antonio se ha convertido en una persona con influencia en el mundo virtual y en las aulas, aunque él es de los que considera que «los profesores son los auténticos influencers, lo llevan siendo desde el principio de los tiempos, lo son y lo seguirán siendo. Si hay algo que de verdad me motiva es eso, enseñar a los que serán en un futuro maestros para las nuevas generaciones, más ahora que acabo de ser padre de mi primer hijo, hace 5 meses».

Dice que la última herramienta que ha llegado a la enseñanza es la inteligencia artificial: «Es algo que inquieta a muchísimos profesores, por lo fácil que es hoy presentar un trabajo hecho por el ChatGPT por ejemplo, y al mismo tiempo nos abre un mundo de posibilidades. Hasta hace 15 años el conocimiento estaba en los libros, ahora los alumnos van a Google para encontrar información extensa de forma rápida y estoy seguro de que la IA va a ser el siguiente paso. Cada vez que surge algo nuevo se dice que va a ser la hecatombe: las calculadoras iban a acabar con las Matemáticas, las tablets con los libros y, ahora, ChatGPT con los profesores. Pero la historia demuestra que las dos cosas son compatibles. La educación y la tecnología son dos mundos que están condenados a entenderse y hay que hacerlos compatibles y sacar lo mejor de cada uno de ellos».

Como premiado en los ADE de Apple, Antonio asistirá este verano a un encuentro en Londres para compartir allí sus experiencias y conocer otras iniciativas pioneras en el ámbito de la educación. Explica que la empresa estadounidense que ha internacionalizado el logo de la manzana organiza tres reuniones para los premiados en esta convocatoria. A la capital del Reino Unido asistirán los educadores distinguidos de Europa, Oriente Medio e incluso África. Los de América, a una en Dallas (Texas), Y los de Asia, en Australia. Aunque no han trascendido datos sobre el número de docentes seleccionados este año a nivel mundial, suelen rondar las 100 personas, una cifra que en esta ocasión se verá incrementada ya que los premios fueron interrumpidos con motivo de la pandemia. En España, lo habitual es que sean seleccionados, entre dos educadores y media docena -como máximo-, en cada convocatoria. 

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