Educación prepara cambios a partir de secundaria: se acabaron los itinerarios en la ESO y Bachillerato ofrecerá cinco ramas

Paula Méndez / R. S. REDACCIÓN

EDUCACIÓN

Imagen de archivo de estudiantes de bachillerato en la Biblioteca Central Rosalía de Castro del Campus de Ourense
Imagen de archivo de estudiantes de bachillerato en la Biblioteca Central Rosalía de Castro del Campus de Ourense Santi M. Amil

Bachillerato tendrá una nueva modalidad general, junto a otras cuatro. El ministerio plantea que la reordenación académica entre en vigor entre el curso 2022/23 y el siguiente

09 mar 2022 . Actualizado a las 17:48 h.

El Ministerio de Educación ha planteado una reordenación académica a partir del próximo curso, siguiendo la estructura educativa recogida en la Lomloe, uno de los principales elementos que desarrolla la nueva ley de Educación, en marcha desde el pasado mes de diciembre. Los cambios afectarán principalmente a la ESO y a Bachillerato y entrarán en vigor, en principio, entre el curso que viene (en los niveles impares) y el siguiente (en los pares).

Entre las propuestas, que serán llevadas este miércoles al Consejo General de Educación para su debate con las comunidades autónomas, destacan la obligatoriedad de la asignatura de Religión, que deberá ofertarse en todos los centros con carácter optativo. También será obligatoria la asignatura de Historia de la Filosofía en segundo de Bachillerato, que vuelve a convertirse en materia común, o la creación de una rama de Bachillerato genérica, según han ido haciendo público otros medios a lo largo del día.

Estas son las líneas generales que el ministerio quiere cambiar a partir de secundaria:

Educación Secundaria Obligatoria

Uno de los principales cambios en educación secundaria es la eliminación de los itinerarios, lo que permitirá a los estudiantes elegir asignaturas de ramas distintas. Así, los alumnos podrán elegir, por ejemplo, Latín y Biología, algo que anteriormente no se podía hacer. De esta manera, el último curso de la ESO será común y, a su término, permitirá a los alumnos decidir no solo la rama en la que desean continuar sus estudios, sino si estudiarán Bachillerato o Formación Profesional.

Además, entre primero y tercero de la ESO, se impartirán nuevas asignaturas como Tecnología y Digitalización —que deberá impartirse en al menos un curso y se dividirá en dos optativas en cuarto: Tecnología por un lado y Digitalización por otro—, y Cultura Clásica o la realización de un trabajo monográfico, proyecto multidisciplinar o de colaboración con un servicio de la comunidad, todas opciones optativas. También durante esos tres años, será obligatorio cursar una de las asignaturas artísticas (Educación Plástica, Visual y Audiovisual o Música) en cada curso y Educación en valores cívicos y éticos en al menos uno de ellos.

Bachillerato

En cuanto a Bachillerato, los estudiantes podrán elegir, según la propuesta, entre cinco modalidades: Ciencias y Tecnología, Humanidades y Ciencias Sociales, Artes (dividido en Música y Artes escénicas y Artes Plásticas, Imagen y Diseño) y General, una nueva categoría en la que los alumnos tendrán la oportunidad de cursar materias humanísticas y científicas. Dicho itinerario genérico va dirigido a aquellos alumnos que deseen estudiar un grado universitario que no precise venir del bachillerato con un conocimiento exhaustivo de determinadas materias, como carreras sociosanitarias o vinculadas a ciencias sociales.

En lo que se refiere a nuevas asignaturas, la rama científico-tecnológica incorpora una nueva materia de tecnología e ingeniería tanto en el primer como en el segundo curso, así como desdobla dibujo técnico según sea para arquitectos o para diseño y artes plásticas, por lo que formaría parte del itinerario de artístico, donde también se incluyen nuevas disciplinas como Cultura Audiovisual y Técnica Vocal. En cuanto a la modalidad humanística, la Economía de segundo curso se convertirá en Empresa y diseño de modelos de negocio, mientras que el Bachillerato General contará con la asignatura Economía, Emprendimiento y Actividad Empresarial en primero, y Movimientos Culturales y Artísticos en segundo. A todo esto, se le suman aquellas optativas que decidan las comunidades autónomas y que no aparezcan en esta oferta.