Los jóvenes gallegos, a la cabeza de la OCDE en respeto a otras culturas

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

EDUCACIÓN

Imagen de archivo de una manifestación en Ferrol en favor de la inmigración
Imagen de archivo de una manifestación en Ferrol en favor de la inmigración CÉSAR TOIMIL

España se sitúa a la cabeza del Informe PISA en competencia global, que incluye empatía, respeto e interés por el resto del mundo

22 oct 2020 . Actualizado a las 19:11 h.

El alumnado español es el más respetuoso con personas de otras culturas, según el informe PISA 2018 sobre competencia global, y los jóvenes gallegos están en la cabeza del país. El rendimiento de España en esta competencia, que evalúa la capacidad para desenvolverse en un mundo interconectado, supera en 13 puntos la media de la OCDE.

Los escolares españoles (especialmente ellas) son también los que se muestran más capaces de adaptarse a los cambios culturales

El Informe PISA mide, además de las competencias en Lectura, Ciencias y Matemáticas, otras cuestiones igualmente importantes para la escuela, y una de esas se enmarca en la llamada Competencia Global, en la que los jóvenes españoles obtienen unas de las mayores puntuaciones de la OCDE.

Como explica Andreas Schleicher, responsable de Educación de la OCDE, en la introducción del informe, «para encarar la globalización, esta generación requiere nuevas capacidades. Tanto en ambientes empresariales tradicionales como en los más innovadores, los jóvenes necesitan colaborar con personas de diferentes disciplinas, culturas y sistemas de valores, con el propósito de solucionar problemas complejos y crear valor económico y social».

¿Qué es la competencia global? Según PISA, «la capacidad pluridimensional que aúna el saber examinar cuestiones locales, globales e interculturales; comprender y apreciar distintas perspectivas y puntos de vista; saber interactuar de forma respetuosa con los demás; y emprender acciones para el bien común y el desarrollo».

El Informe PISA analiza diferentes aspectos dentro de este total:

CONOCIMIENTO

Para saber qué nivel de conocimiento tenían los jóvenes sobre las otras realidades, se les preguntó sobre salud mundial, migraciones, conflictos internacionales, hambre en el mundo, causas de la pobreza o situación en la igualdad de hombres y mujeres a nivel internacional.  Los estudiantes tenían que elegir cuál era su situación entre «Nunca había oído hablar de esto», «Sé bastante sobre esto y podría explicarlo bien».

En este terreno, España estaba un poco mejor que la media de la OCDE, y si se contabilizase Galicia por separado, estaría de novena de los 35 países analizados (España ocupa el puesto 14.º). Es la primera comunidad española, con Andalucía y Navarra en el otro extremo.

Como en el resto de España, los alumnos gallegos que más saben de estas cuestiones son chicas de raíces locales y de entornos favorecidos; en esto último hay una diferencia significativa, pero en Galicia es menor que en otros puntos del país (en Cataluña la diferencia es el doble).

AUTOEFICACIA 

Una vez establecido el conocimiento, PISA pidió al alumnado que valorase hasta qué punto se sentía capaz de llevar a cabo, por su cuenta, una serie de tareas: explicar cómo las emisiones de dióxido de carbono afectan al cambio climático global, debatir las diferentes razones de por qué las personas se convierten en refugiados o explicar por qué algunos países sufren más el cambio climático que otros. En este asunto, las puntuaciones españolas no fueron tan buenas, y encabeza el grupo de los países menos preparados, entre los que están Bulgaria, Nueva Zelanda, Eslovenia, Estonia, Islandia, Italia, Rumanía o Eslovaquia. Galicia está prácticamente en la media de España, muy lejos de Asturias o Castilla y León, donde los jóvenes presentan una capacidad de acción elevada incluso para las ratios occidentales.

También hay una diferencia significativa entre jóvenes de entornos favorecidos y los que no, un fenómeno que se da en todos los Estados, y en general en una proporción mucho mayor que España; dentro del cómputo nacional, Galicia es, junto con Murcia, las comunidades con menos diferencias socioculturales en este sentido.

EMPATÍA

Un tercer parámetro que analizó PISA es el de la empatía. Comprender los diferentes puntos de vista es lo que se valoraba a partir de la adhesión a estas cinco afirmaciones: «Intento observar los puntos de vista de todos en caso de desacuerdo, antes de tomar una decisión»; «Creo que hay dos lados en cada cuestión e intento ver los dos»; «A veces, intento entender mejor a mis amigos imaginándome cómo ven las cosas desde su perspectiva»; «Antes de criticar a alguien, trato de imaginar cómo me sentiría yo si estuviera en su lugar»; «Cuando estoy molesto con alguien, intento ponerme en su lugar».

España está en el cuarto lugar del total de la ODCE en este aspecto, solo superada por Turquía, Corea y Rumanía; y Galicia está en la media española, aunque es sexta por la cola en el listado de comunidades. Y aunque vuelve a haber diferencias significativas según las familias de los alumnos encuestados, no son tan acusadas como en otros epígrafes.

RESPETO

España destaca especialmente en este punto, es la primera de la OCDE, y Galicia en el conjunto español (segunda tras Canarias). Esto supone que los alumnos estaban de acuerdo con frases como «Respeto a las personas de otras culturas como seres humanos iguales», «Doy espacio a las personas de otras culturas para que se expresen», «Valoro las opiniones de las personas de culturas diferentes». Además, en Galicia no hay diferencias entre el grupo sociocultural o el origen étnico del estudiantes, aunque sí hay una mayor tendencia a valorar a los demás entre las chicas que los chicos.

INTERÉS

PISA establece también un ránking en el interés, es decir, si el alumno quiere aprender cómo vive gente de otras zonas, saber más sobre sus religiones, apreciar la perspectiva que tienen del mundo y cuáles son sus tradiciones.

Nuevamente los jóvenes españoles muestran una gran disposición en este sentido, solo superado por turcos y mexicanos. Galicia está en la media estatal, aunque en la parte baja de la tabla. En este capítulo sí que hay grandes diferencias según los grupos que se analicen: los más interesados en aprender son estudiantes de clases acomodadas, sobre todo mujeres y, en menor medida (en Galicia apenas se distingue) entre alumnos nativos.

INMIGRANTES

¿Y cómo se acepta a los inmigrantes? Al que llega de otro país para trabajar en España, los jóvenes locales lo aprecian mucho más que la media de la OCDE. Solo hay una mejor acogida en Portugal, Canadá o Corea. Y Galicia vuelve a estar a la cabeza, solo por detrás de Canarias, con niveles que superan incluso las medias de Portugal. Los alumnos españoles creen firmemente con los alumnos inmigrantes deben tener las mismas oportunidades que los nativos, que deben ser libres de seguir sus costumbres y estilos de vida y contar con todos los derechos de cualquier nativo, incluso el de votar si llevan el tiempo suficiente en el país. 

En Galicia las opiniones son muy similares sin importar el entorno sociocultural o étnico del alumno. Nuevamente, las mujeres son más empáticas y tolerantes que los hombres.

ADAPTABILIDAD

Las cuestiones teóricas tienen una parte práctica en la adaptabilidad de los estudiantes: si el alumno se adapta a las situaciones, si puede cambiar su comportamiento según dónde este, si podría adaptarse a una nueva cultura o interactuar con ella. España encabeza el ránking occidental, aunque en este caso Galicia no mantiene ese liderazgo y se sitúa en quinta comunidad por la cola, en la media estatal.

COMUNICACIÓN INTERCULTURAL

Para mostrar respeto al otro, uno debe entender que la forma de comunicarse debe cambiar con respecto a algunos estereotipos. Estar pendiente de cómo reaccionan las personas de otras culturas ante una intervención, comprobar que hay entendimiento por ambas partes, escoger con cuidado las palabras y escucha con atención es lo que se valora en este apartado. España sigue en los puestos mejores, aunque en este punto superado por Corea, Portugal, Malta, Francia y Canadá. Galicia está un poco por encima de la media estatal, pero en el grueso de la tabla.

CIUDADANÍA GLOBAL

¿Se consideran los jóvenes de hoy ciudadanos del mundo? Es decir, ¿sienten la necesidad de hacer algo cuando ven las condiciones de vida de los demás? En España y Galicia, sin duda. La solidaridad española está sobradamente contrastada y parece que no empeora en las nuevas generaciones: solo están por delante Corea, Portugal y Turquía. En el listado español, Galicia está nuevamente de segunda, tras Canarias.