Doce aulas se añaden a la lista de espacios confinados por el covid

La Voz REDACCIÓN

EDUCACIÓN

Los centros educativos despliegan todo tipo de estrategias para mantener a los alumnos protegidos contra el covid-19
Los centros educativos despliegan todo tipo de estrategias para mantener a los alumnos protegidos contra el covid-19 ALBERTO LÓPEZ

Sanidade contabiliza centros afectados en 68 municipios de la comunidad

24 sep 2020 . Actualizado a las 13:09 h.

Ninguna provincia gallega se salvó ayer de sumar casos positivos de covid en las aulas escolares. El comunicado oficial de Sanidade del día hablaba de un total de 176 casos y 49 aulas cerradas en 138 centros educativos, lo que supone un incremento en un solo día de trece casos y doce aulas. El listado de localidades ha crecido con centros de Nigrán, Baiona, Meis, A Cañiza, Vigo, Barro, Teo, Santiago, Ourense, Lugo, Pedrafita do Cebreiro, Carballo y Narón. Son ya 67 los concellos en los que hay notificado algún paciente en la comunidad escolar.

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En este punto hay cierta polémica por parte de los centros. Y es que Sanidade contabiliza como positivos casos de alumnos o trabajadores que, por ejemplo, no han ido nunca al centro hasta ahora, precisamente porque estaban enfermos antes de empezar el curso; sin embargo, sí aparecen en la lista. Esto despista a las familias, que llaman preocupadas a los colegios preguntando qué aula está afectada. Eso pasó con el CPI O Cruce (Cerceda) o con el centro de FP Ánxel Casal-Monte Alto (A Coruña). Desde los centros se insiste en recordar a las familias que cuando se da un positivo «real» en el colegio o instituto, la dirección se pone en contacto con todas las familias afectadas, informándoles de los pasos a seguir.

Tanto la detección de los casos como las normas son dictaminadas desde Sanidade. En grupos de escolares de corta edad se suele confinar de forma preventiva a toda la clase y a veces se encargan PCR a los contactos más estrechos del paciente; entre los mayores se tiende a tomar las medidas menos drásticas posibles, y por eso hay muchos más casos que aulas cerradas en este momento. El hecho de un alumno o el trabajador de un centro sea positivo en covid no significa que necesariamente se encuentre en mal estado, ya que entre los menores es muy habitual ser asintomáticos.

El 80% con un caso

De los 145 colegios que han estado en la lista de Sanidade, en 117 solo se ha contabilizado un caso, es decir, en el 80% de las ocasiones no se puede hablar de rebrote, sino que se trata de pacientes puntuales que, si las medidas de aislamiento funcionan, quedan en eso. Solo hay un número significativo de afectados en nueve centros, y de este grupo con más pacientes, siete tienen solo tres casos. El resto de centros tiene dos positivos.

En Galicia hay unos 1.500 centros educativos y 350.000 alumnos, aunque hasta ahora los estudiantes de ESO, bachillerato y FP (unos 150.000) no estaban yendo a clase.

Piden el servicio de enfermería escolar y alertan a la Fiscalía de no tenerlo este año

Los sindicatos Satse (enfermería) y ANPE (profesorado) han trasladado a la Fiscalía de Menores de Galicia un escrito alertando del riesgo que tienen los estudiantes, especialmente aquellos con alguna patología previa, por su desprotección en las aulas ante el covid-19. Dicen que las «distintas administraciones no están utilizando todos los medios a su alcance para mitigar y controlar el riesgo de contagios a través de la presencia de enfermeros en las aulas». Denuncian que el coordinador Covid es un docente, cuando debería ser un profesional sanitario, pues en él recae una «importante responsabilidad» que exige cualificación.

Explican las entidades que una vez que los centros educativos han abierto, existe «una gran preocupación entre los padres y madres, profesorado y el resto de la comunidad educativa sobre la posible expansión del coronavirus». Y detallan de forma pormenorizada las actuaciones acordadas desde el inicio de la pandemia en diferentes ámbitos, y en ese contexto entienden que «las destinadas a proteger a los niños en sus centros educativos no son suficientes», especialmente para los menores con patologías crónicas previas, como diabetes o asma.