Los decanos de Educación proponen que se vacíe la bolsa de interinos con nuevas oposiciones antes de implantar el mir

s. c. REDACCIÓN / LA VOZ

EDUCACIÓN

MARCOS MÍGUEZ

El problema de estos graduados es que durante años no se convocaron suficientes puestos

06 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«La implantación de un nuevo sistema de acceso a la carrera docente no puede estar condicionada por los interinos, pero sí hay que dar salida a estos profesionales». Lo dijo ayer Carmen Fernández Morante, secretaria de la Conferencia de Decanos de Educación y responsable de la facultad de Santiago.

La manera de aunar ambas exigencias que sopesan los decanos es aprovechar el período de transición al mir y los demás cambios para «vaciar» la bolsa de interinos. «El nuevo sistema tardará dos o tres años en implantarse, y en ese tiempo el Estado debe comprometerse a convocar suficientes plazas en las oposiciones para nivelar la lista de interinos. Primero tenemos que saber cuántos interinos hay en España -reconoce Morante- y aumentar las plazas a concurso». Recalca que el problema de estos graduados es que durante años no se convocaron suficientes puestos, y eso se puede revertir.

Una carrera continua

A lo que no están dispuestos los decanos es a desaprovechar el momento sin hacer los cambios que la profesión necesita. Fernández Morante entiende que hay que avanzar con visión de futuro, buscando «una carrera docente como un continuo, con un proyecto coherente, porque si no, no sirve. Pensar en el mir educativo como una medida aislada es un error. Hay que comprometerse con un modelo». Y ese modelo por el que apuestan todos los decanos de España (incluso de algunas universidades privadas) tiene varias patas, pero el mir es una de ellas. «El mir es un modelo de éxito, y nosotros podemos aprovechar su experiencia».

Recuerda que, por ejemplo, el examen de acceso a la formación especializada es por momentos ajeno a la carrera, y muchos alumnos que cursan Medicina a partir de tercero comienzan a estudiar el temario, ya no el de su licenciatura, sino el del mir. También señala la falta de formación en innovación durante la fase de especialización, algo que también han detectado y que por tanto se podría paliar para los profesores.